Las tecnologías ha pasado a jugar un papel fundamental en nuestra vida cotidiana. Aportan una gran comodidad, nos mantienen conectados e informados, y podemos hacerlo prácticamente todo de forma digital. A pesar de estos indudables beneficios, hemos llegado a un punto en el que nos hemos convertido en esclavos de nuestros dispositivos. Si vives pegado a tu teléfono móvil, puede que estés padeciendo una adicción. ¿Cómo identificar si estás haciendo un uso normal de smartphone o la cosa se está volviendo obsesiva? En la propia duda está la respuesta. Si crees que puedes ser adicto al móvil, es probablemente lo seas.
1NOMOFOBIA, UN NUEVO TRASTORNO
Sales de casa, bajas en el ascensor y sales a la calle. De repente echas la mano al bolsillo y no notas el móvil, entonces comienzas a cachear el resto de la ropa, el bolso, la mochila, a la vez que experimentas sudores fríos y palpitaciones. ¿Te ha pasado? En este caso puede que sufras lo que se ha bautizado como ‘nomofobia’, que es el miedo irracional a no llevar el teléfono móvil. Es un trastorno psicológico tan reciente que todavía no consta en el Manual Diagnóstico y Estadístico de las Enfermedades Mentales, pero es más que probable que con el tiempo termine incluyéndose.