Muchos usuarios utilizan WhatsApp como una herramienta simple para enviar mensajes, fotos, videos o audios de forma segura. Pero no todos se ajustan a las pautas de las condiciones de servicios para proteger la privacidad.
Incluir a alguien en un grupo de WhatsApp sin su consentimiento, compartir fotos intimas o enviar capturas con conversaciones privadas son solo algunos de los comportamientos que llevan a convertirse en infracción o delito sin ser conscientes de sus consecuencias penales.
3Amenazas, injurias y difusión de noticias falsas
Según indica las condiciones de servicio de WhatsApp, está prohibido, entre otras acciones, “la publicación de material falso y el comportamiento ilegal, amenazante, intimidatorio, que incite al odio o que sea ofensivo en términos raciales o étnicos”.
La Justicia puede utilizar los mensajes como pruebas, siempre y cuando se realice una pericia técnica que ratifique que son reales y no fueron adulterados. Si los mensajes fueron obtenidos ilegalmente, violando el derecho a la privacidad, no son válidos.
