Alfonso Fernández Mañueco se ha opuesto hasta el último momento dejar entrar a Vox en el Gobierno de Castilla y León. «Hemos cedido, pero ellos no se han movido en ningún momento durante las negociaciones«, han asegurado fuentes del PP a este diario. Vox tendrá las Consejerías de Agricultura, Servicios Sociales y Educación, según las fuentes.
Pocos minutos antes de comenzar la constitución de las Cortes y tras un ultimátum de Vox, Mañueco permitirá la entrada de los conservadores en su ejecutivo. La falta de apoyos, pese a tener muy avanzada la negociación con Soria Ya, y la posibilidad de repetir de nuevo las elecciones pesan más que mantener un Gobierno.
Hemos llegado a un acuerdo de legislatura con Vox
El PSOE, pese a la insistencia del PP, no ha aflojado y exigía romper todo acuerdo con Vox para facilitar la investidura con la abstención. Esta exigencia hubiera significado romper todo acuerdo en la Comunidad y Ayuntamiento de Madrid, Andalucía y Murcia, entre otros.
EL ULTIMATUM DE VOX FUNCIONA PARA FRENAR A MAÑUECO
El líder azul de Castilla y León ha ninguneado a los 13 procuradores de Vox hasta instantes finales e ‘in extremis’, con las reticencias de Alberto Núñez Feijóo, el único presidente ‘popular’ que ha anulado a los conservadores de Santiago Abascal, permitirá el primer gobierno de coalición en la comunidad, gobernada por el PP desde hace 35 años.
«Hemos llegado a un acuerdo de legislatura con Vox«, ha sostenido Mañueco en sus redes sociales, aunque no ha dado a conocer ningún detalle sobre qué asientos ocuparán los conservadores. Sin embargo, las fuentes consultadas indican que los 13 procuradores conservadores tendrán la presidencia de las Cortes y una de las secretarías, así como tres Consejerías que reivindicaban desde la noche electoral del pasado 13 de marzo.
Para Mañueco, este Gobierno será «sólido y estable», una declaración que llega tras una larga noche de negociaciones y sin acuerdo alguno. Y es que, negociar con Vox no es negociar con Soria Ya. Las posiciones de los conservadores eran inamovibles como inasumibles para los ‘populares’ castellanoleoneses. De esta forma, el PP deja en bandeja de plata un cambio drástico en las políticas de igualdad, subvenciones de la Junta al campo, la industria, sindicatos y patronales, así como otros recortes de gasto superfluos. Y es que, Mañueco ha entregado de facto un poder que no había ostentado hasta ahora Vox.
VOX CONTROLARÁ AHORA LAS SUBVENCIONES AUTONÓMICAS A SINDICATOS
Los ‘verdes’ de Santiago Abascal tendrán ante sí su primera prueba de fuego. No sólo gobernarán, sino también gestionarán, hechos que hasta ahora no había querido consumar, pese a que los números sí daban, ni en Madrid ni en Andalucía. La exigencia de entrar en el Gobierno se ha dado por primera vez en esta comunidad.
La alternativa pasaba por una abstención crítica del PSOE, un movimiento que finalmente Luis Tudanca ha tenido que descartar por órdenes de Ferraz, según ha podido conocer este medio. El líder socialista se había mostrado favorable a esta opción, más tras el buen resultado cosechado hace apenas un mes, a tan sólo dos escaños del PP. Sin embargo, desde el cuartel general del PSOE se exigía romper todo acuerdo con Vox y poner en marcha el cordón sanitario y antidemocrático, como ya firmó en Cataluña.
EL PP DE MAÑUECO: DE PASEO TRIUNFAL Y EVITAR A VOX A PACTAR
Mañueco esperaba un paseo triunfal el pasado 13 de marzo, con una convocatoria electoral innecesaria, pero se necesitaba acallar la posibilidad de una moción de censura auspiciada por Ciudadanos y el PSOE. Los ‘naranjas’ los grandes perjudicados, con una considerable caída y tan sólo un escaño, el de Francisco García Igea.
Con los 13 de Vox y los 31 del PP, la mayoría absoluta estaba asegurada a priori. Tres escaños por encima de los necesarios, 41, de un total de 81. Los ‘populares’ querían mantener la presidencia de la Cámara de Castilla y León, un puesto que exige Vox y que finalmente tendrá. También ha pedido al menos una secretaría de las tres que están establecidas. Para estos cargos es necesario el apoyo de la mayoría absoluta en primera votación. En caso contrario, sería en una segunda ronda pero con mayoría simple, obteniendo el puesto la opción más votada.
El PP ha contado con otras propuestas, como la de Soria Ya, aunque sólo serviría para alargar la agonía, sin estabilidad. Los tres escaños de esta formación creada ‘ad hoc’ para estas elecciones municipales no se harán valer.
FEIJÓO TRATA DE ROMPER TODA RELACIÓN CON VOX, COMO HA CONSEGUIDO EN GALICIA
Desde primera hora de la mañana, Vox ha difundido sus términos y condiciones para la rendición de Mañueco. Entre los argumentos esgrimidos se encuentra el ninguneo del PP hacia los votantes de la formación verde. Y es que, el propio Mañueco concedió a Ciudadanos, con un escaño menos, una presencia notable en el Ejecutivo y puestos clave de Las Cortes. Los ‘naranjas’ ostentaron la Vicepresidencia y tres Consejerías, las mismas condiciones impuestas por Vox. Ahora, se deberá conocer la letra pequeña de este acuerdo.
Alberto Núñez Feijóo, por su parte, había dado vía libre a Mañueco para contener a Vox. El candidato a la dirección del PP sabe cómo frenar a los conservadores y esperaba que Vox se quedara fuera del Ejecutivo castellanoleonés. El también presidente de Galicia fue el único que no permitió la entrada de los candidatos autonómicos de Vox y con una aplastante mayoría absoluta. Una estrategia que busca imponer en todas y cada una de las comunidades para desactivar a los de Abascal.
Eso sí, Feijóo pidió al PSOE la abstención para no tener que enfrentarse a su congreso con el primer Gobierno de PP y Vox en coalición. Los socialistas tendrán ahora una mayor munición para continuar atacando al PP por este nuevo acercamiento a los conservadores.