El Gobierno ha aprobado este martes, en el Consejo de Ministros, el III Plan Estratégico de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres (PEIEMH), que prevé una inversión de 20.319 millones de euros entre 2022 y 2025 para impulsar políticas públicas feministas.
Fuentes del Ministerio de Igualdad han explicado que se trata de una inversión histórica, puesto que el país no contaba con un plan de estas características desde 2016 y, entonces, la inversión apenas superaba los 3.000 millones de euros. El Plan aprobado ahora por el Ejecutivo, tendrá una vigencia de 2022 a 2025.
Tal y como ha informado la ministra del ramo, Irene Montero, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, este documento se distribuye en 4 ejes: Buen Gobierno: hacia formas de hacer y decidir más inclusivas; economía para la vida y reparto justo de la riqueza; hacia la garantía de vidas libres de violencia machista para las mujeres; y un país con derechos efectivos para todas las mujeres.
Sobre el primero ha destacado que es un «manual de instrucciones» para que todas las políticas que se desplieguen desde la Administración tengan perspectiva de género, desde la elaboración de una Ley o un Plan, a la elaboración de un pliego de contratación pública o unas bases de subvenciones; mientras que de la segunda ha señalado que es la de «mayor dotación». De hecho, de los más de 20.000 millones que se destinan a este Plan, más de 18.000 (un 91% del total) van para este eje.
En este caso, se trata, según ha indicado Montero, del punto encargado de cerrar las «brechas más profundas», especialmente en materia de empleo y de corresponsabilidad.
Así, Igualdad destaca en este punto la ampliación de la educación de 0-3 años, modernización del Sistema para la Autonomia y Atención a la Dependencia (SAAD) o la ampliación del Plan Corresponsables, así como la ratificación del convenio 189 de la OIT, sobre la mejora laboral de las trabajadoras del hogar.
IMPLICAR A LOS HOMBRES
En cuanto al relacionado con las violencias machistas, Montero ha apuntado que se aplicará en todos los proyectos legislativos que se pongan en marchas en esta materia y trabajará en la coordinación institucional para ofrecer servicio de atención integral a las víctimas.
Y en cuanto al cuarto eje ha indicado que recoge medidas diversas que afectan a las mujeres «olvidadas», como las que tienen discapacidad, las racializadas, las migrantes o las LGTBI. Según ha explicado la ministra, son aquellas que han visto como las actuales políticas «no respondían a su realidad, a sus vidas y necesidades».
Del mismo modo, se buscará «implicar a los hombres» en la «consecución de estos objetivos» y aplicar políticas feministas «en todos los ámbitos».
El contenido de este documento, impulsado por el Ministerio de Igualdad a través del Instituto de las Mujeres, fue aprobado por el Consejo de Participación de la Mujer en diciembre de 2021.
En este sentido, la responsable de Igualdad ha agradecido y destacado la labora del Instituto de las Mujeres en este proceso, así como al movimiento asociativo feminista, que es el que compone el Consejo de Participación de la Mujer.
Al final, ha indicado Montero, se han recogido hasta una veintena de líneas de trabajo y medio centenar de objetivos específicos para lograr la igualdad efectiva de mujeres y hombres en el país.