Los chicharrones son trozos de grasa, generalmente de cerdo, aunque también se pueden obtener de otro animal, que se fríen hasta que quedan dorados y muy crujientes, de forma se elimina la mayor parte de su grasa. Una vez cocinados, se pueden condimentar con un poco de sal, pimienta o las especias que más gusten.
En el caso del chicharrón de cerdo, que es el más común, es lo que se obtiene de freír la piel de cerdo en su propia grasa, en este proceso, la piel se queda muy esponjada, y la pieza queda muy jugosa y crujiente.
5HERVIR LOS CHICHARRONES
A continuación vertemos el agua en una sartén. Tiene que ser la cantidad suficiente para cubrir el chicharrón, así que lo mejor es no usar una sartén demasiado honda. Añadimos un poco de sal al agua, añadimos los chicharrones y tapamos la sartén.
Ponemos a fuego fuerte hasta que rompa el hervor y después dejamos que siga cociendo a fuego bajo hasta que el agua se evapore por completo. Una vez que el agua se haya consumido, subimos a fuego medio y dejamos que se siga cocinando el chicharrón, ahora en su propia grasa.