El concejal más incómodo que ha tenido el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, vuelve a la carga. Se trata de José Manuel Berzal Andrade y presidió durante años el distrito de La Latina hasta que desde la cúpula del PP madrileño decidieron apartarlo debido a los numerosos escándalos de su vida privada. Tras su marcha, la Corporación municipal respiró aliviada, sin embargo, Berzal sigue teniendo relación con el sector público y además sobre un delicado asunto que preocupa a Cibeles. Hablamos de las licencias de VTC que están desatando ampollas en el sector del Taxi ya que se están adjudicando numerosos contratos públicos que poco ayudan al servicio público. Uno de los beneficiaros de este regadío de fondos públicos es el propio José Manuel Berzal que preside una compañía de VTCs a la que han sido otorgadas sendos contratos a dedo.
Empecemos desde el principio. Tras ser retirado de su cargo como edil, José Manuel Berzal decidió dedicarse a tiempo completo al interesante negocio de las VTCs que empezaban a proliferar por España. Las puertas giratorias hicieron su trabajo, y José Manuel Berzal llegó a la presidencia de Unauto VTC España, la asociación mayoritaria de VTCs. En esta empresa, que tanto perjudica al taxi, colocó a su hijo Alberto Berzal y a su íntimo amigo, José Antonio Parrondo como propietario de Auro VTC y presidente de Unauto VTC Madrid. De este modo, el hijo del exconcejal y Parrondo se convirtieron en socios gracias al expolítico del Partido Popular.
el hijo del exconcejal y Parrondo se convirtieron en socios gracias al expolítico del Partido Popular
Aunque destacan estos lazos familiares políticos en la principal empresa de VTC española, lo que más llama la atención es la gran cantidad de contratos públicos que se adjudica esta compañía. Unauto VTC España ha sido beneficiaria de sendos contratos menores que no salen a contrato público y que son otorgados a dedo por las instituciones públicas. Además, según fuentes consultadas por MONCLOA.com, José Antonio Parrondo dio servicio a Unauto Iniciativas y Desarrollo SL, liderada por José María Goñi, que se hizo con contratos millonarios de urgencia debido a la pandemia de la Covid sin tener VTC entonces. «Esta empresa está administrada por el secretario de la asociación que él mismo preside, Unauto VTC España, algo sorprendente ya que adjudicar a dedo a una empresa de nueva creación, que no dispone de tarjetas de transporte para cubrir unos servicios que son urgencia Sanitaria de la Cam es cuando menos sospechoso, más siendo propiedad de una persona tan cercana tanto a nivel personal como profesional», explican estas fuentes que aseguran que «se lleva millón y medio de euros por contratos a VTCs sin tener VTCs».
Lo curioso de la historia es que las instituciones madrileñas, lideradas por el Partido Popular, sigan regando de fondos a la empresa dirigida por un exmiembro de la formación al que decidieron echar por numerosas polémicas relacionadas con citas nupciales extrañas y usos irregulares de las sedes del distrito Latina. No obstante estas vicisitudes, la Comunidad de Madrid ha otorgado dinero público a la empresa que lidera Berzal desde que comenzó la pandemia e incluso se le otorgó una generosa dotación especial durante la borrasca Filomena. Según el contrato oficial al que ha tenido acceso este medio, la empresa del exconcejal del PP se adjudicó más de 45.000 euros para trasladar personas a los centros de salud de la Gerencia Asistencial Atención Primaria con motivo del temporal de la borrasca Filomena. Cabe destacar que este servicio podría haber sido dado por el sector del Taxi.
UNO DE LOS ENEMIGOS DEL TAXI
Está claro que José Manuel Berzal es un acérrimo defensor de las VTCs. Más que nada porque es su negocio y su modo de vida ahora que ha abandonado la política. O la política le ha abandonado a él, según quiera verse. Y es que ya desde su época de concejal, Berzal defendió la actividad de los vehículos con conductor que empezaban a emerger en la capital lastrando los ingresos de los taxistas. Es por ello que, en pleno conflicto entre el Taxi y las VTCs, Berzal era un perfil más que incómodo para el Partido Popular.
Mientras los taxistas hacían una huelga feroz para preservar sus empleos, Berzal se dedicaba a comprar licencias VTC que años más tarde han sido beneficiadas por contratos públicos. A la vez que el Taxi luchaba por sus derechos, el concejal del PP comenzaba a hacer sus pinitos en el sector privado de este negocio a la vez que el Ayuntamiento de Madrid otorgaba ayudas al sector para tratar de solucionar el conflicto.