Daniel Cid narra «los desplazamientos» de un personaje en la novela ‘L’espai d’un instant’

El investigador y profesor de Estudios de Diseño Daniel Cid narra «los desplazamientos» de un personaje en su primera novela, ‘L’espai d’un instant’ (Empúries), ganadora del XLI Premi Just M. Casero, dotado con 2.000 euros.

La novela parte de la idea del escritor Georges Perec de que vivir es pasar de un espacio a otro haciendo lo posible para no golpearse, así como de la convicción de que «los espacios no están hechos de muros sino de aperturas que se traspasan», según ha explicado el autor en rueda de prensa este miércoles.

Cid narra el «deambular» de un individuo centrándose en cuatro momentos de su vida: su infancia, su adolescencia, su emancipación y la vuelta a su ciudad natal para cuidar de su padre enfermo.

Con todo, en vez de centrarse en los hitos del periplo vital del protagonista, Cid se centra en los pequeños momentos de tránsito, en sus reflexiones sobre una estancia, sus miradas a la calle o sus paseos.

El autor traslada así a la ficción cuestiones que ha abordado en su trabajo como investigador, que se ha centrado en explorar la idea de habitar y «en la ciudad practicada más que la urbana», es decir, en la arquitectura que se hace a partir de su uso, de su tránsito.

La novela no da a conocer mucho del protagonista, pero a lo largo de sus 190 páginas comparte con el lector una forma de mirar: «El protagonista se interesa por los pequeños misterios de la vida, por la atmósfera de un ambiente o por unos objetos azarosamente reveladores», ha dicho Cid.

BARCELONA, MALLORCA, NUEVA YORK

Los barrios del Eixample y el Raval en Barcelona, Mallorca y Nueva York son algunas de los escenarios que «habita» el protagonista, aunque, como la novela se organiza por temas y no de forma cronológica, el lector no pasa consecutivamente por ellos, sino que lo hace de forma simultánea.

El editor de Empúries, Jordi Rourera, ha dicho que es una novela que busca los límites del género, y que, huyendo de la noción típica de argumento, parece «que quiera tratar de la vida misma», más que narrar una vida dramatizada.

También ha destacado el estilo de Cid, que ha descrito como muy poético y visual, con una prosa «llena de imágenes que ves cuando lees».