El Consejo de Informativos de TVE ha expresado este martes su «decepción» y su «enérgica protesta» después de que el pasado viernes, la Comisión de Debates Electorales votase por mayoría que fuese CyLTV la encargada de producir y distribuir la señal de los dos debates electorales y se rechazase la oferta que hizo Radio Televisión Española de producir uno de dichos ‘cara a cara’.
Desde su punto de vista, resulta «incomprensible» que una comisión formada por representantes de los medios de comunicación y colegios profesionales haya tomado una decisión que «lesiona tan gravemente la pluralidad que, literalmente, exige la normativa referenciada».
Asimismo, ha señalado que existiendo la obligatoriedad de organizar dos debates electorales y habiendo dos propuestas de dos medios de comunicación diferentes para albergarlos, «se antoja injustificable, desde el más elemental sentido común, que no se haya dispuesto que cada uno organice uno de ellos».
«Sin aportar argumentos, se ha optado por que uno de ellos organice los dos», ha denunciado el Consejo, que cree que el «veto» a la radiotelevisión pública supone un «importante agravio» para la ciudadanía.
Según denuncia el Comité de Empresa de RTVE en Castilla y León y ha confirmado este Consejo de Informativos, la composición de la comisión organizadora de los debates electorales «cuenta con una mayoría de representación de intereses empresariales mediáticos confluyentes, lo que puede inclinar en buena medida las votaciones y decisiones de la misma».
«Nos preguntamos, entonces, si se estaba jugando una partida con las cartas marcadas o con un resultado final preconcebido. E insistimos: el interés ciudadano y la pluralidad informativa, ¿dónde quedan?», ha planteado.
El Consejo ha señalado que RTVE ha interpuesto recurso contra esta decisión ante la Junta Electoral de Castilla y León. «Desconocemos el recorrido del mismo, pero sí llamamos la atención sobre la necesidad de que tanto la dirección de la Corporación RTVE, instituciones públicas, partidos políticos (y sus candidatos) y ciudadanía en general hagan frente común en la defensa inequívoca de la radiotelevisión pública como referencia de pluralidad y eje vertebrador de la información nacional y regional», ha manifestado.
Por último, ha advertido de que «hacer lo contrario, por acción u omisión, resultaría no solo deshonesto, sino un flagrante incumplimiento de sus deberes». «No se debe permitir, nunca y en ningún caso, la exclusión y el arrinconamiento de la radiotelevisión de todos», ha concluido.