Seguro que te ha pasado más de una vez: a la hora de terminar de comer sueles pedir un postre, cualquiera, para tener esa sensación tan placentera de sentirte lleno y satisfecho por la comida que acabas de ingerir. Pero ¿te has dado cuenta de que por mucho que te sientas lleno siempre hay espacio para los postres? No te preocupes, no es que tengas ansiedad por la comida, de hecho es algo bastante normal y todo ello responde a una razón. Precisamente en este artículo queremos hablarte de ello, así que sigue leyendo si quieres enterarte de la razón por la que ocurre esta situación.
10Además, dejan más espacio en el estómago para la comida
Pero hay más, porque una vez que el azúcar está en el interior del estómago, se crea la sensación ficticia de que el estómago tiene un tamaño mayor al que en realidad tiene. De ahí que casi siempre apetezca comer un dulce en cualquier momento.