miércoles, 4 diciembre 2024

Avistan tres ejemplares de cerceta pardilla en la desembocadura del río Mijares

Tes ejemplares de cerceta pardilla (Marmaronetta angustirostris), especie que actualmente se encuentra en grave peligro de extinción, han sido avistadas en las lagunas artificiales del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares, gestionado por los ayuntamientos de Almassora, Burriana, Vila-real, la Diputación de Castellón y la Generalitat Valenciana.

La primera observación la realizó un ornitólogo holandés que vio a las aves en esta laguna desde el observatorio de madera. Poco después, este aficionado compartió la observación con otro ornitólogo habitual de la zona, Antonio Engra, que rápidamente logró fotografiar a las tres cercetas pardillas. Esta cita «extraordinaria» ha sido corroborada también por el guarda rural del Consorcio río Mijares Gonzalo Juan.

Es el primer encuentro conocido de la especie en el Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares, ya que ni el Anuario Ornitológico de la Comunitat Valenciana ni el Banco de Datos de Biodiversidad de la Conselleria de Transición Ecológica recogen cita alguna de la especie en el paraje fluvial, ha informado el Consorcio de la Desembocadura del Mijares en un comunicado.

Las cercetas pardillas han descansado y se han alimentado en el complejo de lagunas artificiales del paisaje protegido, concretamente en la laguna central. La ubicación más cercana donde se ha podido constatar su presencia es en la Marjal de Almenara.

Las tres aves podrían haber llegado de la marjal dels Moros, ubicada entre las poblaciones de Puçol y Sagunt, ya que en los últimos días había un grupo en este humedal. En esta época del año las cercetas pardillas se encuentran en período de dispersión, son aves nómadas y es fácil que las tres cercetas pardillas hayan salido del grupo de la Marjal dels Moros, explican desde el Consorcio.

«A UN PASO DE DESAPARECER»

La cerceta pardilla es un pato de pequeño tamaño que luce un plumaje marrón poco llamativo. Las causas conocidas de que esté «a un paso de desaparecer» de Europa son los meses persistentes de sequía durante la reproducción, la gestión calamitosa del agua en los humedales en los que vive, la aparición de botulismo asociada a la mala calidad del agua y la caza indiscriminada.

Estas aves anidan de forma muy localizada en los humedales salobres del sur de Alicante como son el parque natural del Hondo de Elx Crevillent, el parque natural de las Salinas de Santa Pola, el Hondo de Amorós o el Clot de Galvany.

En los años noventa del siglo pasado llegaron a haber entre 200 y 300 parejas de cercetas pardillas en España. Actualmente, hay poco más de 30 parejas en la Comunitat Valenciana (Fondo de Elx Crevillent) y Andalucía (Doñana), el total de la población europea.