sábado, 23 noviembre 2024

Las promesas hechas en la Cumbre del Clima podrían limitar el calentamiento global a 1,8 ºC

Las promesas hechas en la XXVI Conferencia de las Partes (COP26) del Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se celebra estos días en Glasgow (Escocia), podrían ayudar a limitar el calentamiento global a 1,8 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales, según ha asegurado Fatih Birol, director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía (IEA).

Birol ha calificado el progreso de las conversaciones como «extremadamente alentadoras» y ha señalado que, si los países cumplen sus promesas, podrían ayudar a limitar el daño al planeta.

«En los últimos días hemos escuchado varias promesas y compromisos de los países, en términos de sus emisiones netas cero para 2050, algunos de ellos son un poco más a largo plazo. También escuchamos que más de 100 países se han comprometido a reducir sus emisiones de metano. Ayer por la noche les pedí a mis colegas que volvieran a ejecutar nuestros modelos. ¿Qué significaría si se implementaran todas las promesas anunciadas a partir de ayer por la noche? ¿Dónde estamos en términos de aumentos de temperatura?», ha afirmado este jueves durante una intervención en la COP26.

A su juicio, el resultado es «extremadamente alentador». «Si todas las promesas de neutralidad de carbono y metano se implementaran por completo, tendríamos una trayectoria de aumento de temperatura de 1,8 °C. Esto es excelente», considera.

Según Birol, está surgiendo una nueva economía energética global donde los países compiten entre sí. «No solo están impulsados por las preocupaciones climáticas, están impulsados por la economía, los avances tecnológicos y van muy fuertes», ha dicho.

Sin embargo, en el mismo evento, al margen de la conferencia climática, John Gummer, presidente del Comité de Cambio Climático de Gran Bretaña, ha advertido contra la complacencia. «Lo estamos haciendo lo suficientemente bien como para no estar tan desanimados como para comer, beber y alegrarnos porque mañana moriremos», ha manifestado.

«Siempre me digo a mí mismo: mira hacia atrás 10 años y piensa: ¿habrías creído que podríamos haber llegado a donde llegamos ahora hace 10 años? Y la respuesta es no. Creo que lo hemos hecho mucho mejor de lo que hubiera pensado. Pero, habiendo dicho eso, creo que deberíamos decirnos a nosotros mismos que, a menos que consigamos lo que necesitamos, ciertamente nos estamos moviendo hacia algo por encima de los 2 ºC», añade.

Por eso, cree que lo que está sucediendo estos días en la COP26 es «crucial». «Y lo que es más importante, que la gente haga realemnte lo que dice que va a hacer», ha concluido.