Son negocios que tienen una gran aceptación en la capital y no solo en la época de verano, ya que, en el distrito Moncloa-Aravaca, hay un gran número de heladerías de la mayor calidad, de las que se puede disfrutar durante todo el año.
Como bien es sabido, Madrid cuenta con numerosos distritos y cada uno de ellos alberga lugares y establecimientos en donde poder disfrutar. En el caso del distrito Moncloa-Aravaca, se puede visitar la Casa de Campo, el parque de atracciones o el Zoo Aquarium, además de poder ver de cerca el Manzanares o el parque del Oeste.
Además de estos rincones, Moncloa es una zona de la capital llena de restaurantes, cafeterías y terrazas, siendo también uno de sus mayores reclamos, las heladerías. Lo cierto es que las heladerías de Madrid son bastante conocidas y muy buenas, no obstante, en Moncloa se encuentran las mejores, con una gran variedad de helados y otras elaboraciones, con diferentes sabores, diseños y con una calidad extrema.
En el caso de visitar este distrito madrileño y ser un amante de los helados, a continuación, se detallan los establecimientos que son de obligada visita.
Los Alpes
Se trata de una de las heladerías más antiguas de la zona, ya que fue fundada en 1950. Se caracteriza por ofrecer los clásicos helados más tradicionales, elaborados con productos frescos y naturales y con una gran variedad de sabores. De igual modo, en su carta incluyen granizados y horchata, entre otras cosas.
Situada en la calle Arcipreste de Hita número 6, los helados de Los Alpes están perfectamente equilibrados en cuanto a sólidos, grasas y azúcares. Típico negocio artesano de toda la vida, también destacan sus tartas que elaboran ellos mismos en su propio obrador. Abiertos durante todo el año, sus sorbetes, natas y yogures son inigualables.
Kalúa
La heladería Kalúa se ubica en la calle Fuencarral 131 y es otro de los ejemplos de heladería artesanal en Moncloa. Ellos mismos elaboran sus productos, consiguiendo en todos ellos un sabor único que los hace inigualables. Para conseguirlo, las elaboraciones se realizan a diario utilizando para ello todo tipo de ingredientes naturales y en su mayoría, con denominación de origen.
Más de 40 sabores de helado como chocolate, limón o mascarpone, así como incluyen en su carta otros productos ricos y refrescantes como smoothies, batidos, horchata, leche merengada o granizados. Para la época de frío, nada como probar sus cafés y chocolate caliente acompañados de una magnífica repostería.
Zúccaru
Los helados italianos son reconocidos en todo el mundo y en Zúccaru lo saben, precisamente por este motivo es una de las mejores heladerías sicilianas de la zona. Situado en calle Vergara número 16, este establecimiento representa al clásico “gelato” italiano artesanal.
Todos ellos son fabricados con los ingredientes más frescos y naturales, con una excelente calidad, sin contar con aromas o colorantes artificiales.
Aunque los sabores de sus helados son increíbles, hay que decir que Zúccaro también cuenta con productos más específicos, como helados sin gluten, sin lactosa o incluso veganos. Incluyendo también sus riquísimos sorbetes.
La Romana
Otra de las heladerías italianas más populares de Moncloa, donde día a día elaboran sus helados con técnicas artesanales y productos naturales. Se trata de una firma que lleva mucho tiempo en el sector, abriendo sus puertas por primera vez en 1947 en Rimini (Italia) para aterrizar en Madrid en 2016.
Helados con tradición creados a partir de las recetas más antiguas a los que se les ha añadido un toque moderno, ya que cuentan también con opciones veganas. Situada en calle San Bernardo 96, es una de las heladerías con mayor calidad y más creativa de la zona.
Popota
Por último, hay que hablar de la heladería Popota, que se encuentra en el 36 de la calle Pez. Se trata de un establecimiento que trae a Moncloa los mejores sabores de helados del mundo, con elaboraciones propias donde la calidad de los ingredientes es protagonista.
Crean helados especiales con sabores tan originales como el limón con lavanda o croissant, aunque también tienen los sabores de toda la vida. Utilizando ingredientes muy sofisticados como la vainilla de Madagascar, su buen hacer ha hecho que, actualmente, Popota figure entre los establecimientos madrileños con una estrella Michelín.
