Los contactos entre el Partido Popular y el PSOE avanzan. Las altas instituciones se han renovado y los nombres empiezan a ver la luz. Sin embargo, hay dos teorías que circulan por los partidos que auguran el futuro que le espera al Consejo General del Poder Judicial. La primera asegura que la razón por la que el PP ha cedido a renovar las altas instituciones (el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo y la Agencia de Protección de Datos) es para quitarse presión y aguantar sin renovar el CGPJ hasta las elecciones generales de 2023; pero la segunda asegura que el PP y el PSOE ya se han puesto de acuerdo y están ultimando algunos flecos sueltos para renovar un Consejo en funciones desde 2018. Pasada una semana del primer acuerdo, las fuentes del PSOE indican que todo está encarrilado y que habrá un Consejo General del Poder Judicial nuevo para después de Navidades.
Las apuestas están echadas, pero parece que el optimismo socialista se impone a la primera teoría de que el PP quería quitarse de encima algo de presión. Sin embargo, aún no hay garantías. El PSOE asegura que aprovecharon la coyuntura para ceder en algunos nombres de vocales y conseguir que el Partido Popular aceptara la renovación del CGPJ. Los socialistas creen que este acuerdo está a poco de cerrarse y que habrá un nuevo Consejo General del Poder Judicial para después de Navidades. Esta es la fecha que estiman, pero no descartan otras. Sea como sea, el PSOE ha conseguido con esa cintura que tanto caracteriza al presidente del Gobierno que el PP ceda a sus demandas. Pero no lo ha hecho gratis, siempre que el optimismo socialista sea real.
El optimismo socialista contrasta con las exigencias populares
Los populares solo deslizaron una posibilidad. Al ser preguntados en meses anteriores sobre la posibilidad de renovar el Consejo General del Poder Judicial, respondían que estarían dispuestos siempre que Sánchez aceptara votar a favor de una reforma que cambiara la forma en la que se eligen a los vocales del CGPJ. El optimismo socialista contrasta con las exigencias populares. Pese a que las fuentes del PSOE aseguran no conocer el acuerdo al que pueden haber llegado entre Pedro Sánchez y Pablo Casado, el PP indica que solo habrá renovación si el PSOE cede a sus demandas. Y en esta posición, la única vía que contempla Casado es la de renovar el Consejo General del Poder Judicial a cambio de que que el PSOE acepte una reforma en la forma de selección de los vocales.
El sistema que quiere el Partido Popular es simple. Quiere sacar las manos de los partidos políticos a la hora de designar quiénes son los vocales. Ahora mismo, las quinielas del PSOE auguran que será Pilar Teso quien se haga con la presidencia del Tribunal Supremo, pero es el hecho de que se sepa antes de que siquiera se haya hecho público un acuerdo el que crispa a los populares. El PP de Casado quiere que sean los jueces los que elijan a los vocales. Y quieren que tampoco las asociaciones judiciales tengan mano mediante cupos, sino que cada magistrado represente un voto. Sin más. Y si hay acuerdo es porque el PSOE ha cedido, al menos en parte, a esas demandas del PP, o eso aseguran fuentes populares.
El sentir del PSOE es que está todo hecho en lo que se refiere al CGPJ. Consideran que la presión ha hecho que el PP ceda definitivamente a renovar un Consejo que lleva en funciones desde 2018. Las fechas que manejan, sin embargo, no están del todo claras. Lo que sí aseguran es que probablemente se anuncie este nuevo CGPJ para 2022, después de Navidades, para así tomarse un tiempo para elegir a los vocales. El principal escollo que minó las negociaciones entonces fue la intrusión de Podemos en la elección de vocales. Ahora parece que el PSOE ha encontrado el modo de esquivar ese veto.
Para las altas instituciones restantes el PP ya parece haber cedido en algunos nombres. El más sonado ha sido el del excandidato del PSOE a las elecciones de la Comunidad de Madrid Ángel Gabilondo, que ha sido el elegido por el partido de Sánchez para designar el puesto de Defensor del Pueblo. Un secreto a voces que el PP apoyará a cambio evidentemente de algunas concesiones de Sánchez. Gabilondo cumplirá su sueño de ser defensor del Pueblo, pero el CGPJ también parece que conseguirá cambiar de presidente del Supremo para alegría de Teso.