El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha anunciado una querella contra la diputada de ERC Montserrat Bassa que «vomitó todo su odio» desde la tribuna del Congreso llamándoles «salvajes» y «fuerzas de ocupación», en una intervención en la que rechazó que se dieran pluses a los agentes destinados en Cataluña o que la Jefatura Superior se mantenga en Vía Layetana de Barcelona.
El SUP ha explicado que se querellará por delitos contra el honor, injurias y calumnias en una iniciativa judicial que emprende «tras confirmar que el Gobierno no se decide a apoyar a esos policías que se jugaron el físico y sus carreras por defender el Estado democrático en Cataluña».
«Mucho menos comprendemos que días después, el Gobierno de España, y en especial su ministro de Interior, continúen mirando hacia otro lado permitiendo que se acose, insulte y calumnie a la Policía de todos los españoles desde las instituciones», asegura el SUP en un comunicado.
El sindicato se refiere a la intervención de Bassa en una moción de Vox en la que se debatía sobre el acoso que sufren los policías y guardias civiles por parte de grupos independentistas. «Les tenemos asco y aversión, les deseamos que se vayan, fuera las fuerzas de ocupación», clamó Bassa, haciendo suya las consignas de quienes protestan por la presencia en Cataluña de la Policía Nacional y la Guardia Civil.
La diputada de ERC enlazó la crítica por las torturas durante el franquismo en Vía Layetana, sede de la Jefatura Superior de la Policía Nacional, con las «mutilaciones y aporreos con rabia» durante el referéndum del 1-O y los informes judiciales basados según ella en fundamentos falsos.
«Con sus declaraciones en referencia a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la señora Bassa se convirtió en el mejor ejemplo de la situación que se debatía en ese momento en el Congreso», sostiene el SUP.
El sindicato no comparte que la libertad de expresión ampare a Bassa para «servirse de la sede de la soberanía nacional» en su objetivo de acusar a los policías de «torturar y asesinar, también de mutilar y aporrear a los ciudadanos catalanes durante los graves incidentes del desafío independentista de 2017».