viernes, 22 noviembre 2024

Ferrovial, Pozuelo y un concejal de excedencia: el nuevo escándalo que sacude a Quislant

La falta de transparencia del Ayuntamiento de Pozuelo brilla también por su ausencia en cuanto a los contratos de limpieza del municipio madrileño. La alcaldesa de Pozuelo, Susana Pérez Quislant, tuvo que hacer extraños movimientos en la Junta de Gobierno para adjudicar el contrato de limpieza viaria y recogida de residuos a una empresa en la que uno de sus concejales había pedido una excedencia.

Se trata del contrato de gestión de los servicios públicos de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria que ha estado en continuas desaprobaciones durante años. Dicho contrato debía haber sido licitado en 2018 pero acabó siendo licitado en 2020. Meses más tarde de ese mismo año, este contrato fue aprobado en una Junta de Gobierno Local en septiembre aunque fue suspendido dos meses más tarde en favor de la prórroga del contrato de 2008. Una vez aprobado, se rectificó y se volvió al viejo contrato de limpieza que data de hace más de una década. Un movimiento muy extraño.

Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcon 2015 Moncloa

Todas estas trabas para aprobar un contrato sobre la limpieza viaria y la prolongación de un acuerdo de hace más de 13 años apuntan a un concejal: Francisco Manuel Melgarejo. Este edil del Ayuntamiento de Pozuelo se abstenía en sacar adelante este proyecto ya que según fuentes del consistorio pozueleño mantenía una excedencia con el Grupo Ferrovial, empresa a la que pertenece CESPA S.A., la firma que se adjudicó este contrato de gestión de los servicios públicos de recogida de residuos y limpieza viaria en Pozuelo.

A pesar de la abstención de Melgarejo, el Ayuntamiento de Pozuelo sacó adelante la adjudicación. La empresa en la que trabajaba el edil recibió más de 16 millones de euros por este servicio con la condición de ampliar el contrato hasta los 22 millones de euros anuales en el caso de tener que proceder a una recogida de residuos de amianto. La alcaldesa, Susana Pérez Quislant, presumió de este buen precio aunque en 2018 se calculó que los servicios de limpieza tenían un presupuesto anual de 10 millones de euros.

UN NUEVO CONCEJAL PARA QUE FIRME

La alcaldesa pozueleña quiso poner remedio ante la resistencia de Francisco Melgarejo de votar a favor de este contrato por cuestiones de conflicto de intereses. Para ello, Quislant destituyó a Melgarejo de su cargo y nombró a David Rodríguez como concejal de Medio Ambiente para que votara a favor y se diera luz verde al contrato. Pero todo tiene un precio y Quislant tuvo que meter a este último en la Junta de Gobierno con su consiguiente subida de sueldo.

El concurso fue ganado por la empresa de la que Melgarejo era excedente

Todo salió bien y Rodríguez presento la propuesta junto con el teniente alcalde Eduardo Oria. Las empresas CESPA, FCC y U.T.E. VALORIZA se presentaron al concurso que fue finalmente ganado por la empresa de la que Melgarejo era excedente. Estas decisiones municipales acarrearon una dilatada contratación de servicios y una crisis de gobierno que finalizó con nuevos dedazos en el consistorio de Pozuelo de Alarcón. Todo un «chancullo» made in Quislant.