La mejor época para tatuarse es el otoño o el invierno, ya que podemos mantenerlo protegido bajo la ropa sin apenas preocuparnos, hasta que esté perfectamente curado. Sin embargo no siempre puede ser así, y por lo tanto si te haces un tatuaje en los meses más calurosos, habrá que tener en cuenta algunas precauciones extra para evitar disgustos. El problema de tatuarse en verano es que vamos a tener la tentación de querer lucirlo cuanto antes, o de disfrutar de la playa y del sol. Pero esto puede tener consecuencias indeseadas, y la recomendación es esperar por lo menos 15 días antes de exponer nuestro nuevo tattoo a la intemperie.
7USAR CREMA SOLAR SIEMPRE
Como advertíamos, el uso del protector solar debe ser constante. Si por lo general se recomienda siempre que nos exponemos al sol, en las zonas tatuadas los cuidados deben extremarse. Hay que utilizar el mayor SPF, y preferiblemente complementarlo con el uso de ropa ligera, especialmente si el tatuaje es muy grande. Además, conviene evitar el sol en las horas centrales del día y si vamos a estar al aire libre, mejor situarse a la sombra.