El pollo es un ingrediente muy presente en muchos platos. Su carne es nutritiva con proteínas de alto valor biológico, con un porcentaje de grasas bastante bajo. Es de digestión fácil y su sabor y textura son muy versátiles para un sin fin de recetas. La típica pechuga de pollo a la plancha es una de las opciones más recurrentes en los periodos en los que se quiere comer más ligero y perder algo de peso. Sin embargo, hay muchas maneras en las que lo podemos incorporar a nuestra dieta, para no aburrirnos nunca y adelgazar sin esfuerzo. Estas son algunas ideas tan sencillas como deliciosas.
4FAJITAS AL HORNO
No hay nadie que se resista a unas buenas fajitas, así que si ya te aburriste del pollo a la plancha clásico, dale una vuelta a tus recetas. Las fajitas se pueden preparar de muchas formas, pero para que el resultado sea una receta ligera, nuestra propuesta es que prepares los ingredientes al horno. Solamente hay que tomar una fuente de horno y colocar, troceados en tiras, pimientos rojos, amarillos y verde, pechuga de pollo. Por otro lado en una sartén preparamos una salsa de tomate con un diente de ajo y un chile jalapeño, y cuando esté listo regamos las verduras y el pollo con esta salsa. Dejamos hornear el tiempo necesario (dependerá de cada horno), y cuando esté listo rellenaremos nuestras tortillas para fajitas.