El pollo es un ingrediente muy presente en muchos platos. Su carne es nutritiva con proteínas de alto valor biológico, con un porcentaje de grasas bastante bajo. Es de digestión fácil y su sabor y textura son muy versátiles para un sin fin de recetas. La típica pechuga de pollo a la plancha es una de las opciones más recurrentes en los periodos en los que se quiere comer más ligero y perder algo de peso. Sin embargo, hay muchas maneras en las que lo podemos incorporar a nuestra dieta, para no aburrirnos nunca y adelgazar sin esfuerzo. Estas son algunas ideas tan sencillas como deliciosas.
2BERENJENAS RELLENAS DE POLLO
Una forma diferente de comer pollo, que siempre triunfa. Incluso es una receta ideal para ofrecer un plato ligero a invitados, por ejemplo en una cena. Simplemente hay que vaciar la pulpa de una berenjena, con mucho cuidado para reservar la piel sin que se rompa. Esta pulpa se tritura y se mezcla con pollo hervido picado (100 gramos por cada berenjena), y se sofríe con un poco de cebolla, pimiento verde y ajo. Se añade tomate triturado para darle más jugosidad y se deja cocinar unos minutos hasta que reduzca. Con esta mezcla rellenamos las berenjenas y las cubrimos con una loncha de queso. Se gratinan 10 o 15 minutos en el grill, y listas para comer.