El Gobierno ha ordenado el envío a Afganistán de un equipo de operaciones especiales para «reforzar» a los 110 militares ya desplegados dentro del operativo para evacuar a colaboradores afganos desde el aeropuerto de Kabul, han informado fuentes gubernamentales.
Un total de 110 militares y 17 agentes del Grupo Especial de Operaciones (GEO) y de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de España –reforzado en las últimas horas con otros tres GEO y dos diplomáticos– participan en el operativo de evacuación encabezado por el embajador, Gabriel Ferrán, y su número dos en la delegación afgana.
La Policía Nacional ha confirmado este lunes que el refuerzo del GEO se encuentra ya en Kabul, previa escala en Dubai, según adelantaron fuentes conocedoras del dispositivo.
«Ya se encuentra en Kabul el refuerzo de agentes del GEO para apoyar en la tareas de evacuación a los 17 policías nacionales desplegados en la zona», ha señalado la Policía en su cuenta oficial de Twitter, enlazando a una fotografía donde se ve de perfil a uno de estos agentes de la unidad de elite.
La labor de los militares y miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado está siendo fundamental desde que el equipo de la Embajada abandonó las instalaciones oficiales en la capital de Afganistán, debido al avance talibán, para trasladarse al interior del aeropuerto de Kabul.
Además de dar seguridad al embajador, Gabriel Ferrán, y a la segunda de la delegación, participan desde los aledaños del aeropuerto en la localización de los afganos y sus familias que previamente han sido avisados porque figuran en las listas del Gobierno para abandonar el país centroasiático.
La tarea está siendo muy compleja debido a la gran cantidad de personas que se agolpan en las diferentes puertas de acceso al aeropuerto, donde también hay presencia talibán realizando controles aleatorios. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha reconocido que existe riesgo incluso de que se produzca algún atentado.
El perímetro de seguridad del aeródromo lo encabezan los militares estadounidenses, con quienes hablan los efectivos españoles para tratar de reubicar en el interior del aeropuerto a los afganos que se han desplazado hasta allí al contar con permiso para subir a los aviones A400M.