El PSOE no tiene ni la menor idea de cómo controlar el precio de la luz. Desde el Gobierno asumen que no tienen la capacidad directa para influir en el importe del kilovatio, pero saben que su horizonte y sus políticas ecológicas no harán más que encarecer el precio de la luz durante los próximos años. Por un lado, el precio del gas (muy al alza) y la subida del barril del petróleo influye en el de la electricidad. Y por otro, el Gobierno quiere limitar el uso de energías nucleares e impulsar todo aquello que emita menos CO2. Con todo esto sobre la mesa, el escenario que afronta el PSOE es desolador porque fuentes de la formación reconocen que no saben cómo hacer para bajar el precio de la luz. El precio ha tocado un nuevo récord llegando el coste de un megavatio hora a 106,57 euros. Solo en 2002 se vio algo así.
El precio de la luz alcanza hoy máximos históricos y sigue batiendo récords. Las mentiras de los socios de Sánchez, también. pic.twitter.com/7v8oCT5l7e
— Ana Beltrán (@abeltran_ana) July 20, 2021
Todos se quejan pero nadie sabe qué hacer. El silencio de los ministros socialistas es muy ilustrativo. Nadie tiene claro cómo abordar el asunto y sobretodo saben que el camino marcado por la agenda 2030 solo llevará el precio de la luz a máximos históricos cada año. Se cerrarán las nucleares, se penalizará la emisión de CO2 vía impuestos y se buscarán fuentes de energía alternativas que no cubrirán las expectativas de los españoles. Y entretanto, cuando las quejas se salgan de los niveles tolerados por el PSOE, el Gobierno hará lo que ha hecho ahora (que no ha servido apenas para nada), bajar los impuestos que gravan las energías con vías a contener la subida del precio. No hay que olvidar que el 50% del importe de la luz son impuestos.
Con todo esto sobre la mesa, uno de los partidos más perjudicados es Unidas Podemos. La hemeroteca no es su aliada y los ministros morados lo saben. El PSOE ha asumido con deportividad que el precio de la luz se escapa a su control porque España tiene un nivel de dependencia total del exterior. El precio del gas (procedente en su mayoría de Argelia) no depende del Gobierno e influye mucho en el de la luz. El problema es que desde Podemos quieren dar una imagen social sensible con la pobreza energética y están presionando a sus socios para ver si pueden hacer algo. Pero el problema es que, o se reducen los ingresos, o directamente se asume que el precio no hará más que subir en los próximos años.
El PSOE reconoce que un «daño colateral» de la política ecológica será la subida de la luz. Los socialistas saben que no depende de ellos y que su agenda solo empeorará las cosas: de ahí el silencio impuesto que guardan desde el Gobierno. Entretanto, el Partido Popular se dedica a erosionar al Ejecutivo con este arma arrojadiza tirando de hemeroteca y de los constantes récords que solo repercuten en el bolsillo de los españoles. «El Gobierno más caro de la historia lo pagas tú», ha comentado el secretario general del PP, Teodoro García Egea.
La idea que tiene el PSOE es aprobar este año un decreto para rebajar el IVA
Los socialistas, aún así, planean llevar a cabo una votación para contener el precio durante su legislatura. La idea que tiene el PSOE es aprobar este año un decreto para rebajar el IVA de la luz. Si contienen un pequeño porcentaje del importe, la luz subirá, pero menos de lo que indica la tendencia. Al mismo tiempo, esta rebaja del IVA es necesaria dado que la agenda verde del PSOE solo hará que todo se encarezca más sin soluciones alternativas. Los socialistas ya están en ello y esperan aprobar este decreto trufándolo con otros dos: uno para apuntalar la retirada del uso de mascarillas en el exterior y otro para reducir la temporalidad de los interinos.
El decreto para bajar el IVA no es más que pan para hoy. La clave del precio de la luz es la dependencia y las fuentes de energía. Sin nucleares y sin una capacidad de producción energética notable, todo esto le estallará en la cara tarde o temprano al país, el problema es que el PSOE está midiendo los tiempos para que el precio de la luz no sea un problema a corto plazo y no manche la campaña electoral soterrada más larga de la historia. Con un IVA más bajo, aguantan hasta 2023. Después de eso, Pedro Sánchez sabe que no podrá optar a gobernar más. El problema que se lo coma otro.
Hay ideólogos cercanos al PSOE que insisten en que esta situación no está marcada por el exterior. Hay quien considera que el precio del gas y el del barril no influyen en el precio de la luz. Sin embargo, desde el PSOE no tienen ningún plan estructural para bajar la luz a corto plazo. Sí que hablan de un plan de aquí a 2050 en el que España será verde y circulará con coches de hidrógeno pero no detallan cómo apuntalarán una electricidad estable y accesible que no solo ataque la cartera de los ciudadanos, sino que permita a la industria española seguir siendo competitiva.