domingo, 24 noviembre 2024

A Vox le gustaría ser como la CUP: los separatistas, los únicos que votaron «no» al estado de alarma

El Tribunal Constitucional declaraba ayer la inconstitucionalidad del decreto del primer estado de alarma que se inició el 14 de marzo de 2020, ante un recurso que fue presentado por Vox. Después de una larga deliberación y unos votos muy ajustados, la sentencia estimaba que las medidas que utilizó el Gobierno fueron de estado de excepción y no de alarma. Al conocer el fallo del TC, el partido de Santiago Abascal celebraba la decisión, y argumentaba que ellos habían sido los únicos que habían votado en contra de la medida, y justificaba la solicitud de moción de censura a Pedro Sánchez presentada en octubre.

También el Partido Popular trató de apropiarse la victoria, con unas declaraciones en las que afirmaba que su líder Pablo Casado había advertido desde el principio de la inconstitucionalidad de la medida y la necesidad de crear una ley de pandemias. Unas afirmaciones que despertaron la indignación de Vox, que no escatimó en descalificativos hacia el partido azul.

Sin embargo, un gráfico publicado en los medios con los resultados de votaciones del Congreso de todas las prórrogas del estado de alarma, muestran una realidad muy diferente. Vox votó a favor de la primera prórroga del estado de alarma, que obtuvo 321 votos a favor, ninguno en contra y 28 abstenciones. El propio Abascal informó del voto afirmativo del partido: “hoy no tenemos más remedio que apoyar la continuidad del estado de alarma”.

Después, se produjeron seis votaciones más en el Pleno del Congreso para seguir prorrogando el estado de alarma, y mientras Vox y PP apoyaban la medida, algunos partidos independentistas optaban por desmarcarse y abstenerse desde el primer momento. Es el caso de Esquerra Republicana, CUP, JXCat y EH Bildu. En la segunda prórroga Vox sí que retiró su apoyo y votó en contra, mientras que el PP voto positivamente hasta en tres ocasiones. A partir de la tercera prórroga, el partido de Casado comenzó a mostrarse más crítico, al igual que los partidos que se habían abstenido de votar, que fueron mostrándose contrarios a la medida impuesta por el Gobierno.