En verano la exposición al sol se intensifica en el tiempo y en la superficie del cuerpo descubierta que recibe la radiación. Hay que protegerse la piel antes de ir a la playa o la piscina con cremas adecuadas, ya que la radiación ultravioleta es muy perjudicial para la salud. En los últimos años se ha intensificado la peligrosidad de la incidencia de los rayos solares ya que la capa de ozono continúa reduciéndose, por la contaminación, protegiendo cada vez menos. Una de las consecuencias provocadas por la exposición prolongada al los rayos solares es la alergia al sol. El organismo puede desarrollar la alergia cutánea por la radiación solar en diferentes formas. La fotodermatosis idiopática puede desencadenar en diversos cuadros clínicos, que necesitan tratamientos diferentes que debe indicar un dermatólogo.
4Erupción polimorfa lumínica
Esta enfermedad, clasificada entre las procedentes por la alergia al sol, presenta síntomas de picor en la piel, enrojecimiento de las zonas expuestas y ampollas pequeñas. Las zonas en las que aparece, a las pocas horas de las exposición a los rayos ultravioleta, son las mejillas, el escote y los antebrazos. Las mujeres de piel clara tienen más probabilidades de padecer la enfermeda, pero solo la sufren entre el 10% y el 20% de la población. Lo mas importante es tomar medidas de prevención y protegerse con cremas solares homologadas para evitar un trágico desenlace.
