El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, se queda donde está. Pero si lo hace es porque la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no ha sido capaz de encontrarle otro sitio «digno» donde mantenerle durante los próximos dos años. La idea de la líder popular era la de colocarle como presidente de la Asamblea o cualquier otro cargo a la espera de darle la «jubilación dorada» de situarle como candidato del Partido Popular en Pozuelo de Alarcón, municipio donde no solo vive, sino que ostenta la presidencia del partido. Al final «no ha habido manera» de buscarle un hueco para estos años y se han visto obligados a «dejarle donde está», tal y como apuntan fuentes del partido, a la espera de que un par de meses antes de las elecciones autonómicas y municipales se baje del barco y empiece a hacer campaña por su municipio.
Lo que está claro es que Ayuso no quiere más a Ruiz Escudero como consejero de Sanidad (a pesar de que le haya mantenido en el cargo y de que consideren que gestionó bien la pandemia). Ha sido la falta de oportunidades y las exigencias de Vox de reducir el peso de la administración las que han dejado a Ruiz Escudero en su puesto. Durante unas semanas, todo el equipo de la presidenta de la Comunidad de Madrid trabajó duro para buscar una salida digna a su consejero más quemado (por la pandemia); Pero no fueron capaces de darle lo que consideraban un puesto ideal para estos dos años: la presidencia de la Asamblea de Madrid, cargo que se ha quedado la que fue consejera de Presidencia, María Eugenia Carballedo. En cualquier caso, no ha generado demasiado revuelo el dejar en el puesto a Enrique, pese a que esto ha perjudicado a Alfonso Serrano, jefe de campaña de Ayuso que sonaba para el puesto.
Lo que llama la atención es que toda la Comunidad de Madrid es consciente de que Ruiz Escudero será el próximo candidato del PP a las elecciones municipales de su municipio. La alcaldesa de Pozuelo de Alarcón, Susana Pérez Quislant, está en el punto de mira del partido desde hace meses y ya tienen sustituto. Enrique Ruiz Escudero les haría ganar de nuevo (a su juicio) en un municipio tan importante como delicado para los populares, pues no hay que olvidar que en este pueblo tuvo lugar más de un caso de corrupción que ha afectado al partido. Enrique es el elegido, Susana está condenada a dejar el puesto y durante estos dos años se preparará el cómo hacerlo.
Enrique Ruiz Escudero sucederá a Pérez Quislant al frente de la alcaldía de Pozuelo
A este supuesto hay que añadir que Ayuso, para dentro de dos años, tendrá el control del PP de Madrid. Con Miguel Ángel Rodríguez y la presidenta de la Comunidad de Madrid al frente de la formación conservadora en la capital llegarán cambios importantes a nivel de candidatos municipales. Algo que refuerza la idea de que Enrique Ruiz Escudero sucederá a Pérez Quislant al frente de la alcaldía de Pozuelo.
Hay que esperar dos años, pero lo que aseguran las fuentes del PP es que el consejero de Sanidad se marcará un Salvador Illa y dejará sus funciones poco antes de que acabe la legislatura (ya que coinciden las elecciones municipales y autonómicas) para hacer campaña por su municipio. Desde el Partido Popular esperan que el golpe de efecto sea lo suficientemente contundente como para quedarse con la alcaldía. La estrategia a seguir, cuentan a MONCLOA.com, es vender que Ruiz Escudero fue el político que se enfrentó a la pandemia con decisiones propias y valientes incluso con el criterio del Gobierno central en contra.
LOS QUE SE QUEDAN CON LAS GANAS
Casi como buitres. La buscada por Ayuso en un principio salida de Ruiz Escudero abrió la veda. Muchos se pensaron que podrían o bien cambiar de consejería o bien conseguir una, pero el resultado no ha sido el esperado. Una consejería del peso de la de Sanidad en tiempos de pandemia, aunque sea en la prórroga, es un buen escaparate donde lucirse y donde crecer como político. Esto hizo que los más ambiciosos pensaran en que podrían heredar el cargo que ostentaba Escudero y que los que aún no tenían cargos de responsabilidad pero mantenían una excelente relación con Ayuso se pensaran que podrían acceder al puesto de consejero/a de Sanidad.
La primera decepcionada es la conocida como «abrecartas» de la Comunidad de Madrid. La consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín Martín, ya estaba preparando las maletas junto a todo su equipo para irse a hacer esas entrevistas que acostumbra a realizar al más puro estilo de Price Waterhouse Cooper en la Consejería de Sanidad. El trabajo de comunicación y de gabinete de los últimos meses en Medio Ambiente se ha centrado en llevar a la consejera a lo que ellos consideran un «lugar mejor» donde medrar a nivel político, pero al final no pudieron conseguir nada de lo esperado. La decisión de que Ruiz Escudero se quedaba donde estaba ha caído como un plomo. Pero Martín Martín no pierde la esperanza.
El otro gran decepcionado es Alfonso Serrano, jefe de campaña de Ayuso. Las quinielas apuntaban a que la presidenta de la Comunidad de Madrid premiaría a Serrano con una consejería, pero una vez más, la decisión de Vox de reducir el peso de la administración ha caído como un plomo dentro del entorno más íntimo de Serrano. Alfonso no ha podido quedarse con Sanidad porque ni siquiera se ha abierto la guerra de sucesión. El premio ha llegado en forma de mantener lo acordado y Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid, ha dado el visto bueno para que Serrano se quede como portavoz del PP en la Asamblea.