El trabajo de los 112 policías municipales que obtuvieron su plaza en 2019 corre peligro. Un fallo en las bases de las oposiciones ha provocado que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) haya dictado sentencia el pasado 11 de noviembre de 2020 en la que anula y se deja sin efecto la convocatoria de la categoría de Policía del Cuerpo de Policía Municipal del año 2019. El error fue el siguiente, el Ayuntamiento de Madrid, por entonces liderado por Manuela Carmena, debía reservar hasta un 20% de las plazas convocadas para los militares de tropa y marinería de las Fuerzas Armadas en su oferta de empleo público, sin embargo, no lo hicieron.
La responsabilidad de la correcta convocatoria de elecciones recaía sobre el Titular del Área de Gobierno de Salud, Seguridad y Emergencias que por aquel entonces era Javier Barbero Gutiérrez, el mismo que en 2016 llamó a los agentes madrileños «gestapillo». Además de inventarse adjetivos calificativos, Barbero ignoró este requisito de reservar el 20% de las plazas para los militares y ahora el trabajo de más de un centenar de agentes está en la cuerda floja. Según la legislación de la Comunidad de Madrid, el Titular del Área de Gobierno de Salud, Seguridad y Emergencias tiene que «aprobar las bases, convocar, gestionar y resolver las convocatorias de selección de personal del Cuerpo de Policía Municipal, Bomberos y las categorías propias de SAMUR-Protección Civil, sin perjuicio de las competencias del Gerente de la Ciudad» y este titular era por entonces Javier Barbero, concejal de Más Madrid en la legislatura actual. Gracias a su chapucera organización de las oposiciones de 2019, la plaza que los 112 agentes se ganaron con sumo esfuerzo ha quedado anulada por la Justicia.
“Yo no quiero tener ninguna Gestapillo al uso que se dedique a investigar a no sé qué señores en función de qué circunstancias”
Pero no es la primera vez que el concejal de Más Madrid crea un incendio dentro de la Policía madrileña y es que les llamó la «gestapillo» provocando el enfado de los agentes. “No quiero gestapillos en la Policía Municipal” fue el comentario desafortunado de Barbero. Pero no fue la única vez que Javier uso este adjetivo calificativo que no aparece en la RAE: “Yo no quiero tener ninguna Gestapillo al uso que se dedique a investigar a no sé qué señores en función de qué circunstancias”, fueron sus palabras para responder a una concejala del PP sobre el futuro funcionamiento de la Sección de Coordinación y Análisis de Información del Cuerpo (SECAI). Ante tales declaraciones de dudoso gusto histórico, la Asociación de Policía Municipal Unificada de Madrid (APMU) envió un burofax al concejal para que no volviera a llamar “gestapillo” a ninguna unidad del Cuerpo, como hizo en dos ocasiones, y para que felicitara a los agentes por su labor en lugar de ofenderles.
BUSCANDO SOLUCIONES PARA LOS 112 AGENTES
Antes de comenzar el proceso judicial, la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) se puso en contacto con el Ayuntamiento de Madrid para que modificará la convocatoria pero nadie del equipo de Manuela Carmen contestó. Asimismo, ATME también intentó comunicarse con el Ministerio de Defensa, institución que respondió asegurando que se llevaría el tema a la Comisión de Seguimiento, no teniendo posteriormente constancia de ningún resultado. Desconocemos si las advertencias de ATME llegaron hasta Barbero el cual convocó las plazas de empleo público sin tener en cuenta el requisito que había sido acordado entre el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Defensa en 2014
En un esfuerzo por recurrir la sentencia, el equipo de Gobierno actual ha interpuesto un recurso de apelación contra la sentencia interpuesta por la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) a principios de 2019. Sin embargo, ha sido en vano puesto que la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) lo ha desestimado.
Los recursos de apelación presentados por el Ayuntamiento de Madrid se sustentaban principalmente en que el consistorio no tenía la obligación de reservar estas plazas, tal como refleja la Ley 1/2018 de Coordinación de Policías Locales de la Comunidad de Madrid, donde se dice que «se podrá determinar una reserva de un máximo del 20 por 100 de las plazas convocadas para el acceso libre de militares profesionales de tropa y marinería con más de cinco años de servicio que cumplan los requisitos establecidos para el ingreso en éstos». Sin embargo, el TSJM ha desestimado tal argumentación al entender que el contenido de la adenda firmada es «imperativo y no potestativo».
Una vez desestimado el recurso, los servicios jurídicos municipales se han puesto manos a la obra para buscar otras soluciones a la chapucera convocatoria de oposiciones de Barbero. «Vamos a buscar todos los resquicios posibles para dar cumplimiento a esa sentencia pero tratando de que no afecten a las personas que estén en posesión de su cargo. Vamos a ver todos las posibilidades. Estamos estudiando todas las vías. Hay que cumplir la sentencia pero nuestra intención es que esos policías sigan patrullando las calles», ha indicado Inmaculada Sanz, la actual titular del área responsable de la Policía Municipal.