Dicen que no existe una relación de pareja igual que otra. Sin embargo, sí es cierto que, en ocasiones, nos podemos guiar por determinados comportamientos a la hora de estudiar las reacciones de las personas que las componen.
Un ejemplo lo tenemos en las rupturas. Aunque tampoco podemos compararlas entre ellas, sí que se suelen cumplir unas pautas que se dan cuando llega un punto de la relación en el que sus miembros no se sienten como antes.
¿Cuáles son? Descubre los dos grandes motivos por los que se rompen las relaciones de pareja.
1La relación se va desgastando
Como es lógico, una relación de pareja no es igual en los comienzos de la misma que conforme el tiempo va pasando. Cuando nos conocemos más, puede que lleguemos a una especie de techo y tengamos esa sensación de que todo es familiar y no hay lugar para las sorpresas.
Esto se traduce en una dejadez por parte de los miembros, según indican algunos expertos en el tema. Las personas dejan de esforzarse en cultivar la relación, pasando la pareja a ser algo secundario en nuestra vida, ya que no la tratamos como al principio.
De hecho, una de las cosas que se suele repetir es aquello de pensar y destacar justo lo que menos nos gusta, dejando de lado lo que antes nos emocionaba. Esto desemboca en dejar de estar presentes, dedicando nuestras alegrías a otro tipo de cosas.