Los principales dirigentes de la Ejecutiva Federal del PSOE han salido a defender este viernes la responsabilidad que tiene su partido de «sanar heridas», ser «valientes» y trabajar por «el bien común por encima del bien propio» para resolver el conflicto catalán, ante el rechazo que ha generado en algunos sectores del partido la posibilidad de que el Gobierno conceda el indulto a los condenados por el procés.
En concreto, ‘barones’ como el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, y el de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, o los históricos socialistas Felipe González y Alfonso Guerra, han alertado del daño que puede suponer tanto para el país como para el partido la concesión de esos indultos, que además el Tribunal Supremo ya ha rechazado en su informe.
Ante estas críticas, los principales dirigentes del PSOE tratan de rebajar la tensión interna y hacer pedagogía para explicar una postura que, aunque defienden como necesaria, admiten que es «difícil» y que puede generar «desgaste», según señalan fuentes gubernamentales.
En este sentido, tanto Moncloa como Ferraz justifican el giro que dio el presidente Pedro Sánchez el martes al abrir la puerta a los indultos, y aseguran que es el camino correcto para solucionar el «conflicto» catalán y reconstruir los «puentes» que se destruyeron, recuerdan, durante el Gobierno del PP de Mariano Rajoy.
«ESPAÑA NECESITA SANAR HERIDAS»
«España necesita sanar heridas. Necesita estabilidad, confianza y diálogo. Y ese es el compromiso del Gobierno y el Partido Socialista Obrero Español», ha asegurado la vicesecretaria general del PSOE y portavoz parlamentaria, Adriana Lastra, en un mensaje en Twitter.
En la misma línea, el secretario de Coordinación Territorial y Relaciones Gobierno-PSOE, Santos Cerdán, ha afirmado que «si el PSOE ha cumplido 142 años es por su valentía histórica a la hora de tomar decisiones en beneficio del interés general, también en Cataluña». «Pensar en el bien común por encima del bien propio es nuestra seña de identidad», ha respondido.
Por su parte, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ha asegurado que «para alcanzar sueños que parecen imposibles se requiere determinación, capacidad de asumir riesgos y voluntad de entendimiento». «Nuestro empeño es una Cataluña libre de fracturas: plena confianza y apoyo a Pedro Sánchez. El PSOE ha ganado ya otras batallas, mantengamos la unidad», ha reclamado.
Y el portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, ha defendido que «la fortaleza del Estado también está en la magnanimidad y en la audacia para encontrar vías para el entendimiento y la convivencia». «Hoy más que nunca necesitamos diálogo, valentía y entendimiento para encarar un nuevo futuro. Ahí estuvimos y estaremos siempre los socialistas», ha ahondado.
«Por encima de intereses partidistas, está la responsabilidad de mantener la unidad y cohesión de España. La búsqueda de soluciones a un conflicto enquistado por la derecha debe primar, con actuaciones valientes que consigan la convivencia y el entendimiento. En ello está el PSOE», ha reivindicado la secretaria de Política Social y de Educación y Universidades del PSOE, Mari Luz Martínez Seijo.
LOS INDULTOS, «HERRAMIENTA VALIENTE Y NECESARIA», SEGÚN SILVANA
La secretaria de Movimientos Sociales y Diversidad, Mónica Silvana, ha ido incluso más allá al asegurar, en otro mensaje en Twitter, que «después de tantos años de confrontación», ha llegado «el momento de la política», y que «los indultos son una herramienta valiente y necesaria en este momento».
En la misma línea, el secretario de Cultura y Deportes, Ibán García, ha afirmado que «un movimiento generoso con los políticos catalanes presos reforzaría la posición internacional de España extraordinariamente», porque «mucha propaganda antiespañola se volvería obsoleta de repente. «Me ha tocado gestionar políticamente esa realidad, sé de lo que hablo», ha afirmado.
A su vez, el secretario general del Grupo Socialista en el Congreso, Rafael Simancas, ha defendido que es necesario «buscar la concordia» porque lo contrario, a su juicio, «es buscar la discordia». «Y porque la discordia nunca nos hizo mejores españoles, ni ayudó nunca a construir un futuro en común», ha apostillado.
EL GOBIERNO TAMBIÉN SE DEFIENDE
Desde el Gobierno, la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, ha defendido que el Ejecutivo «tiene que intentar por todos los medios tomar decisiones que ayuden», y ha argumentado que ya no se trata de un «debate jurídico» sino de una cuestión política «que decide» el Ejecutivo.
Y ante las críticas internas, la también secretaria de Igualdad del PSOE ha avisado de que la posición del partido la marcha al Ejecutiva Federal, y que «todo lo demás son opiniones particulares, respetables». «Pero son instrumentos completamente legales», ha defendido en una entrevista en Canal Sur.
También eludió las críticas este jueves la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, e insistió en que ahora es el momento de la política y que hay que «pasar página», durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Tras afirmar que el PSOE es un partido plural, democrático y en el que se respetan todas las posiciones que se puedan trasladar, Montero insistió en que la decisión de conceder los indultos es una «prerrogativa del Consejo de Ministros», al que corresponde velar por el interés general, que es la «concordia, la convivencia y el fortalecimiento de la democracia».
«A un Gobierno siempre le toca esa defensa del interés general, que está por encima de cualquier consideración, como saben los militantes de mi formación», apostilló la también dirigente socialista, tras señalar que es la obligación del Ejecutivo «sustanciar y ponderar que sus decisiones estén presididas por los valores constitucionales».
A este respecto, fuentes gubernamentales aseguran que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asumido que no puede quedarse de brazos cruzados sino que es su responsabilidad trabajar para solucionar un conflicto en Cataluña que además ha heredado, según denuncian.
De este modo, defienden que aunque se trate de una decisión difícil que puede implicar desgaste, es su deber actuar y no hacer dejación de funciones. Además, señalan que cualquier decisión conlleva pros y contras.