El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha destacado la importancia de las oficinas de justicia en los municipios que creará la ley de Eficiencia Organizativa como una especie de evolución de los juzgados de paz para evitar la despoblación de algunas localidades, en el marco del encuentro que ha mantenido este miércoles con el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Abel Caballero.
Campo y Caballero se han reunido por videoconferencia para avanzar en el trabajo conjunto de cara a la implantación de la oficina de justicia en el municipio, una vez que la ley de Eficiencia Organizativa, cuyo anteproyecto acaba de ser aprobado por el Consejo de Ministros, vea la luz.
Estas oficinas pretenden ser una especie de ventana única de la administración de justicia en cada municipio donde los ciudadanos puedan hacer todos los trámites relacionados con ella, aunque con la aspiración de que también puedan realizar gestiones con otras administraciones, como la tributaria.
«Suena excepcionalmente bien en el ámbito municipal y del territorio», ha dicho Caballero, que ha aprovechado el encuentro para anunciar a Campo que la FEMP creará una Comisión de Justicia para que ambas instituciones trabajen conjuntamente en este proyecto, según ha informado el Ministerio en un comunicado.
UNA «ESPAÑA ASIMÉTRICA»
Campo, por su parte, ha destacado que una de las características de estas oficinas es que «tiene el sello de Justicia, tiene el sello de estrategia país, y tiene la flexibilidad y el dinamismo para adaptarse a las necesidades particulares de cada población». «Estamos contribuyendo a hacer la vida más fácil a estas personas, con el fin de que no abandonen sus municipios», ha declarado.
El ministro ha hecho hincapié en que las oficinas de justicia en los municipios son «una estrategia de país», de ahí que se haya sumado a la iniciativa a otras instituciones, como la FEMP, resaltando el especial valor de ésta, puesto que «es la que tiene el pálpito de esa España asimétrica en cuanto a las concentraciones de población y las necesidades de cada localidad».
Caballero ha valorado las futuras oficinas como «un factor vertebrador de una enorme importancia en España», aduciendo que «es más que ocupar el territorio: da vida a la justicia, al Estado y al municipalismo». «Y nosotros necesitamos fuerzas que converjan en el ámbito del Estado lo máximo posible, sobre todo en un momento complejo como este», ha concluido.
