Cuando se trata de adelgazar, existen muchas formas de hacerlo. Sin embargo, las dietas cetogénicas son unos de los métodos más utilizados. Pero estas no solo generan efectos positivos en la pérdida de peso, sino que directamente proporcionan beneficios para el organismo en sí, los cuales han sido avalados por la ciencia.
La dieta cetogénica no solo proporciona beneficios relacionados con la pérdida de peso, aunque es más conocida por ello, sino que, como menciona la Dra. Isabel Belaustegui para Vida Potencial, también ofrece efectos positivos para la salud en general.
Debido a que existe mucho desconocimiento al respecto, abordaremos todo lo relacionado con los beneficios de la dieta cetogénica. Pero antes, profundizaremos un poco en qué consiste esta.
¿Qué es la dieta cetogénica?
Este término hace referencia a que en lugar de utilizar glucosa, el combustible habitual en las dietas occidentales, ricas en hidratos de carbono, nuestro organismo pasa a funcionar con cuerpos cetónicos, obtenidos a partir de alimentos ricos en grasas saludables.
Y si eres de los que se pregunta cómo puede funcionar esta dieta, ya que consumes grasa; la razón es simple, pues se basa en producir la energía que necesita el cuerpo a partir de la grasa, conocida como cetona. Además, es por esto que recibe su nombre.
Es una de las dietas principales más recomendadas para bajar de peso con mayor rapidez, pero no solo ofrece estos beneficios, sino que, como hemos mencionado anteriormente, también le ofrece efectos positivos beneficiosos al cuerpo y la salud en general.
¿Cuáles son los efectos de la dieta cetogénica?
La dieta cetogénica es tan recomendada debido a que ofrece los siguientes beneficios para la salud.
Permite controlar la insulina
Esta hormona es producida en el páncreas y su función es transportar la glucosa hacia el interior de las células para regular su presencia en sangre. Pero debido al tipo de alimentación que solemos tener hoy en día, con abundantes carbohidratos, el cuerpo debe producir más de esta hormona para que los niveles de glucosa no se disparen, haciendo que el páncreas trabaje incansablemente.
Debido a este exceso de trabajo, el órgano puede acabar agotado, lo que puede suponer un riesgo en el equilibrio de glucosa en la sangre. Pero es aquí donde tienen presencia las dietas cetogénicas, pues al reducir los carbohidratos, entonces se disminuyen los problemas mencionados y que podrían terminar ocasionando diabetes o resistencia a la insulina.
Perder peso
Este es uno de los beneficios principales y por el que es más conocida esta dieta. Cuando se lleva esta alimentación, se consigue estabilizar todas las hormonas encargadas de controlar el apetito, lo que genera sensación de saciedad.
De esta manera, se consigue reducir el porcentaje de grasa corporal, lo que significa que la masa muscular con respecto al peso que tengamos, va a aumentar. En este sentido, no solo mejora nuestra imagen, sino que también cuida nuestra salud y ayuda a mejorar las funciones que desempeñan todos los órganos de nuestro cuerpo.
Ralentiza el envejecimiento
Cuando las personas comen muchas calorías y carbohidratos, se corre el riesgo de que el cuerpo envejezca con mayor rapidez. Esto es especialmente notorio en los países donde la comida rápida o chatarra tiene mucha presencia. Y si a esto le sumamos la ingesta excesiva de azúcares y colorantes, parece obvio que surjan problemas de salud y sobrepeso.
Sin embargo, esto no ocurre con una dieta cetogénica, la cual prioriza el reducir la presencia de carbohidratos en la alimentación, evitando que el cuerpo produzca más radicales libres al acelerar el metabolismo por el consumo excesivo de azúcar.
De esta forma, se consigue evitar el envejecimiento acelerado del cuerpo, permitiendo gozar de buena salud física y emocional.
Mejora el sistema inmunológico
La dieta cetogénica también proporciona efectos de mejora en el sistema inmunológico, debido a que adapta al cuerpo a quemar más grasa e incrementa la producción de las enzimas antioxidantes, lo que genera un impacto en el organismo, ya que disminuye el estrés oxidativo y la inflamación ocasionada por los pésimos hábitos relacionados con la alimentación.
Con esto se puede afirmar que llevar una dieta cetogénica logra disminuir la probabilidad de que nos enfermemos y desarrollemos infecciones.
Y relacionado un poco a la estética, debemos señalar que también proporciona efectos positivos en el cuidado de la piel, preservando la elasticidad y brillo, lo que crea una buena imagen y a su vez autoestima.