Todo el equipo de la líder de la oposición en el Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, es consciente de que su jefa está rodeada de críticas internas. De hecho, las fuentes cercanas al partido aseguran que los apoyos a Rita disminuyen por momentos. Y ¿cuál ha sido la reacción de Maestre ante tal problema interno? Dar la orden a los suyos de que hay que «ignorar» cualquier comentario que ataque su liderazgo, su gestión o asuntos del partido en los que ella esté inmiscuida. El resumen de la orden interna de Rita es «a palabras necias (a su juicio, claro), oídos sordos». Así que quienes quieran criticar que Maestre está llevando el partido al abismo, ya pueden gritar bien alto porque nadie de su equipo de confianza les hará caso.
La idea que tiene la cúpula de Más Madrid es algo así como que «si no lo veo, no existe». Rita Maestre solo mira hacia arriba en su carrera profesional y en sus ambiciones y no quiere saber nada de la plebe. Ya quiso sustituir a Íñigo Errejón al frente de la formación alternativa a Podemos para las elecciones generales. De hecho, montó un pollo considerable junto a los suyos cuando se enteró que no sería ella quien guiaría al pueblo hacia la libertad. Ahora, esa ambición sigue intacta. Pero el problema es que mientras ella rema en una sola dirección junto a su equipo, el barco tiene cada vez más agujeros ante una capitana que ha dado la orden de ignorarlos.
Saben que la exdiputada de Podemos Tania Sánchez acecha y saben que cada vez más concejales de Más Madrid quieren a Rita y a su «dictadura de instituto» fuera de juego. Pero llama la atención que, según ha podido saber MONCLOA.com, la estrategia de Rita Maestre sea solo la de ignorar sistemáticamente cualquier información que hable mal de su gestión o cualquier crítica interna que crezca en el seno de Más Madrid. Rita a lo suyo, que es llegar más lejos.
hay tensión en la cúpula del partido de Rita Maestre tras conocerse que el prestigio de la líder de la oposición está a la altura del betún
Las reacciones no se han hecho esperar y este medio ha podido comprobar que hay tensión en la cúpula del partido de Rita Maestre tras conocerse que el prestigio de la líder de la oposición está a la altura del betún. La histeria se deja notar y, mientras Maestre se dedica a lo suyo, su equipo tiene un extintor en cada mano para apagar los fuegos que surgen tras Rita. El resumen de todo es que si la exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena era agua, su sucesora al frente de Más Madrid es el aceite. Y quienes veían en el proyecto de Carmena algo con futuro y con consistencia política, en Rita solo ven a la delegada de la clase intentando crecer más y más sin contar con el respeto ni el bagaje de su predecesora.
Rita se cree que se va a presentar a las próximas elecciones y considera que es la referente de la izquierda madrileña. Se lo cree de verdad. Sobre la primera cuestión, quienes desean una alternativa a Maestre no las tienen todas consigo dado que Más Madrid se desintegra por segundos por la falta de liderazgo de Maestre y la política interna de ignorar las críticas impuesta por la líder de la oposición. Pero sobre la segunda, es más que probable que Rita tenga que enfrentarse a una dura realidad que no todos consideran que pueda asumir.
La cúpula de Más Madrid ni siquiera se está preparando para consolidar el partido. Mientras unos se dedican a apostar a carreras de caballos y otros solo miran su nómina para llegar a final de mes, Rita y su entorno más íntimo se prepara para asaltar los cielos ante un José Luis Martínez Almeida cada vez más fuerte. Las encuestas auguran un batacazo electoral desde verano de 2020 y los sociólogos expertos consultados por este medio aseguran que es más que probable que los datos ofrecidos por estos sondeos en plena pandemia sean incluso amables con Rita. Habrá que ver cuántos madrileños ven en Maestre ese adalid de la izquierda que ella se cree que es.
MÁS MADRID SE QUEDA VACÍO
La salida de Manuela Carmena de Más Madrid ha dejado entrever que no había una estructura clara detrás de la exalcaldesa. Era Manuela y tras ella una legión de políticos jóvenes que apenas habían cotizado en el sector privado y que eran destacables por su juventud. Todos, excepto el bien amado Jorge García Castaño, que ya encara su segunda década cobrando de lo público. Esta falta de liderazgo, de experiencia y de estructura se ha dejado notar con Rita más de lo deseado. Y si a esto le sumamos una directiva que no mira por todo el partido, sino solo por ella, apaga y vámonos.
Errejón es una pop star. Y si a Más Madrid le quitamos sus máximos exponentes mediáticos, solo nos queda Tania Sánchez, una mujer que ha sido capaz de montar un partido prácticamente ella sola en la Comunidad de Madrid y en la capital y una política válida que se resiste a dar el salto hacia delante tras ver el percal que hay montado en la formación. Con todo esto, solo queda llorar por la vuelta de Carmena y rezar para que Rita se dé cuenta de que en su partido pierde apoyos por segundos. Al menos este es el sentir interno que se respira en Más Madrid ante el avance implacable de Maestre hacia el abismo. ¿Se marcará un Ignacio Aguado en 2023?