Nos acercamos al primer aniversario del confinamiento que ha marcado los 365 días siguientes de la vida de todos. El 8-M de 2020 fue una lucha entre quienes pedían tomar medidas antes de la hecatombe y quienes abogaban porque debía ser un momento de reivindicación sonora. La realidad de lo que vino después tiene una traslación directa en cómo se afronta la jornada del 8-M de 2021: Sanidad dice que «no ha lugar» a manifestaciones masivas mientras cada una de las Comunidades Autónomas opta por una u otra vía. ¿En cuáles se han prohibido las manifestaciones? ¿Dónde no se recomiendan pero se permiten? ¿En qué condiciones?
1EL GOBIERNO: DE LA FOTO DE 2020 AL «NO HA LUGAR»
Si bien hace un año todo el Gobierno de Coalición se mostraba alegre y convencido de que no había ningún riesgo en participar en la manifestación del 8-M, 365 días después las consignas son otras.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, lleva más de quince días insistiendo en que hay que ser responsables. En un tono mucho más directo y determinativo que su predecesor en el cargo, Darias ha insistido en los últimos días en que «no ha lugar» a que se celebren las manifestaciones. Su máxima prioridad parece ser mantener los datos de mejoría y cambio drástico de tendencia de todo febrero. Si comenzábamos el mes con una preocupante incidencia cercana a los 800 casos por cada 100.000 habitantes, ahora ni siquiera llegamos a los 200, que sigue siendo una incidencia excesiva, pero el descenso en tres semanas ha sido drástico. Incluso el Ministerio de Igualdad ha confirmado que seguirá las recomendaciones de su colega en el Consejo de Ministros.
