Los datos oficiales hablan de 653.146 ciudadanos extranjeros en Andalucía. Pues bien, la comunidad autónoma ha solicitado una partida este año y en plena pandemia de 6.570.000,00 millones de euros para ayudar a algunos de estos inmigrantes a acceder a 300 plazas de inserción laboral y social para jóvenes, concretamente, a menores extranjeros no acompañados, los famosos menas. Al final, Europa no ha respondido al importe solicitado por la Junta de Andalucía, pero sí que han concedido a la autonomía 3.613.500,00 euros para ese supuesto. Es la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación la que ha tramitado la ayuda y la que generará con ese dinero las plazas pertinentes.
Estas ayudas se repartirán en todas las provincias de Andalucía y tendrán especial fijación en la inserción de género. La subvención europea, de hecho, está sujeta directamente a «medidas adicionales sobre igualdad de género» y a facilitar la «inserción laboral de las mujeres». En total, en Andalucía, según los datos oficiales de la Junta, hay 653.146 ciudadanos de origen extranjero, pero solo 300 jóvenes que proceden del sistema de protección de menores podrán optar a las plazas de inserción que han puesto en marcha con dinero europeo.
«Con este proyecto se trata de prestar itinerarios personalizados de inserción laboral y social a los jóvenes inmigrantes, de edades comprendidas entre los 18 y los 25 años de edad, para aquellos que proceden del sistema de protección de menores«, detallan desde la Junta. «Dichas acciones van destinadas a lograr el acceso al mercado de trabajo, mediante la plena integración social y la consecución del logro de la emancipación de los inmigrantes, de entre 18 y 25 años de edad, una vez que han cumplido 18 años, o con posterioridad al momento de cumplimiento de esa edad, que hayan pasado por el sistema de protección de menores en algún momento», detallan.
Se trata de promover la integración social de jóvenes que han pasado por protección del menor y que no han tenido una estabilidad familiar decente que les haya permitido dar el salto al mercado laboral. «El objetivo es que las personas participantes en el Programa alcancen la regularización administrativa y cuenten con experiencias laborales y de vida, tanto en el ámbito de actividades de la vida diaria tales como cocinar, tramitación de documentación personal, alquiler de una vivienda, creación y mantenimiento de hábitos personales etc., como en el mundo laboral, logrando así el objetivo de la plena integración social y el logro de su emancipación personal».
Las ayudas no emanan directamente de la Junta, sino que vienen de la UE. Sin embargo, esto no ha quitado que el importe total licitado por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación haya sido sensiblemente superior al concedido. Las estimaciones de este área del gobierno autonómico hablaban de 6.570.000 euros, pero al final se ha concedido prácticamente la mitad para la integración en 300 puestos de trabajo de menores de entre 18 y 25 años. El dinero viene concretamente del Fondo Social Europeo (FSE).
Estas ayudas llegan de la mano de un incremento de la inmigración en España, especialmente en las Islas Canarias (aunque han llegado a otros muchos puntos, como Baleares o incluso Murcia), que ha obligado a la autonomía a llevar inmigrantes a diferentes puntos del país, entre ellos Andalucía. De hecho, el Gobierno de la coalición entre el PSOE y Unidas Podemos ha admitido a raíz de una pregunta de Vox que en 2020 trasladó a 877 inmigrantes de Baleares a diferentes puntos de España, incluida Andalucía. Lo que temen desde partidos como Vox o incluso el PP es que este tipo de subvenciones cuantiosas lleven a un efecto llamada. Y con Canarias está pasando lo mismo.
Esto hay que añadirlo a que Andalucía de por sí es una de las comunidades autónomas que más sufren la inmigración ilegal cada año. De hecho, hace solo tres días saltó en los medios de comunicación que habían llegado a las costas andaluzas hostigados por las mafias de trata de personas más pateras con 99 inmigrantes de origen africano. Una realidad que se vive día a día en la comunidad sin que se tome una política común contra la inmigración en Europa que consiga atajar el problema de raíz. Por el momento, tan solo llegan millones y millones de euros para ayudarles en su integración.
No hay tregua en la llegada masiva de inmigrantes a las costas andaluzas. Alentados por el efecto llamada la izquierda y hostigados por las mafias de trata de seres humanos, las pateras llegan de modo incesante. Este viernes, era rescatada una máy ya son 99 los ilegales que han alcanzado Andalucía en los últimos cinco días.