Dormir bien es algo fundamental para la salud, no solo física, también psicológica. Sin embargo no le damos la suficiente importancia y tendemos a rascarle horas al sueño como si fuese algo de lo que podemos prescindir. Después vienen problemas como la baja productividad, estados de ánimo irritables e incluso depresivos, sistema inmunológico débil, e incluso el sobrepeso puede estar relacionado con el insomnio o una calidad del sueño deficiente.
¿Te cuesta dormir? ¿Tardas mucho en conciliar el sueño y te despiertas muchas veces por la noche? ¿Tienes problemas de insomnio? Existen algunas pautas que podemos incorporar fácilmente a nuestros hábitos y que, si lo hacemos con meticulosidad, pueden dar resultados permanentes. En los casos más graves de insomnio, conviene acudir a un especialista que estudie las causas y nos facilite un tratamiento. Dicho esto vamos a enumerar algunos trucos que pueden ser de gran ayuda.
1MANTENER UNA TEMPERATURA ADECUADA
La temperatura juega un papel importante en la calidad del sueño y probablemente te habrás dado cuenta de ello. Lo ideal es que el dormitorio se encuentre a una temperatura entre los 15 y los 20 grados, así que con ayuda de un termómetro podemos intentar controlar la temperatura ambiente para que se mantenga en ese rango.
En invierno podemos favorecer el bienestar con una ducha antes de ir a la cama, que además de relatar, ayuda a aumentar el calor corporal, que se pierde naturalmente durante el sueño. Así mismo hay que tener en cuenta que a los pies llegan una gran cantidad de venas, por lo que si los mantenemos calientes podemos evitar que el calor se pierda. Unos calcetines cómodos para dormir pueden ser muy buenos aliados para evitar crisis de insomnio.