El sábado pasado tuvo lugar una concentración en Madrid que reunió a 300 personas para rendir homenaje a los caídos de la División Azul y conmemorar el 78º aniversario de la batalla de Krasny Bor, en la que la Alemania nazi, junto a la División Azul, se enfrentó a la Unión Soviética. En el evento se realizaron proclamas antisemitas que han despertado una gran indignación social y que ha llevado a la Fiscalía a iniciar una investigación ante un posible delito de odio. La Delegación del Gobierno en Madrid, por su parte, ha solidado a la Policía Nacional la elaboración de un informe para investigar lo ocurrido en la manifestación.
Las redes sociales también se han hecho eco de la polémica, reaccionado con profundo rechazo al discurso de Isabel Peralta, la actual responsable de la Sección Femenina del partido Falange Española que se refirió al pueblo judío como ‘el culpable’ y ‘el enemigo’. La marcha congregó a varios cientos de personas de ideología neonazi y en el transcurso del acto se entonaron canciones fascistas y se repitió el saludo nazi.
Las embajadas de Rusia y de Israel, así como la Federación de Comunidades Judías en España, han expresado su repulsa y su condena ante tales eventos, en sendos comunicados en Twitter. “Hay formas más dignas de conmemorar a los caídos”, expresaban desde la embajada rusa. La embajadora de Israel tachaba las proclamas de repugnante y decía que ‘no pueden tener cabida en una sociedad democrática’.
Por su parte, VOX, no ha dudado en destacar que la celebración del acto ha respondido al legítimo derecho de los ciudadanos de manifestarse para homenajear a los caídos de la División Azul, apuntando que el partido de Abascal, respeta plenamente el derecho de manifestación de los españoles, una manifestación que además estaba amparada por la Delegación del Gobierno. ‘Nosotros no tenemos nada que decir’, ha sentenciado el portavoz del partido.