Ya nos habíamos dado cuenta antes pero, con el confinamiento y la pandemia ocasionada por la COVID-19, lo cierto es que ahora conocemos mucho mejor la importancia que tienen pequeños detalles en nuestra vida diaria. Antes de que nos diera por adquirir todo tipo de utensilios para elaborar pasteles, una de las cosas que más compramos en el supermercado el pasado año fue cerveza.
El alcohol nos hace sentir mejor, más alegres y, por supuesto, más cercanos a los bares, que en muchos lugares continúan cerrados. Sin embargo, este falso amigo puede ocasionar varias consecuencias sobre las que nos paramos poco tiempo a pensar y que se encuentran estrechamente relacionadas con nuestra salud.
Sí, todos debemos estar alerta. Esto es lo que te puede pasar si tomas cerveza con demasiada frecuencia.
4Cuidado con el sueño, no será reparador
Como decíamos, el ciclo del sueño es muy importante y, cuando consumimos determinado tipo de bebidas, como la cerveza, este se puede ver alterado. La razón principal es que el alcohol de la misma hace que se segreguen ácidos gástricos que podrían producir ese conocido ardor y malestar en el abdomen. Esto no es nada placentero, por lo que también afectará al descanso una vez que vayamos a dormir.
Después de ingerir una bebida con alcohol, puede que nos sintamos cansados y nos empiece a entrar sueño. Sin embargo, este no será nada reparador, lo que hará que despertemos incluso mucho más cansados. Debes saber que un sueño pobre o débil interferirá en el funcionamiento cerebral, así como en la energía de nuestro cuerpo.
Cuando bebemos demasiada cerveza, podremos estar propiciando esta disrupción del sueño. Los niveles de insulina de nuestro organismo se disparan por la noche, por lo que dormiremos tan solo de forma superficial. A la mañana siguiente, nos seguiremos sintiendo aletargados y sin fuerzas para afrontar el día.
