La segunda jornada de protestas convocada en Valencia en apoyo al rapero Pablo Hasél se salda con al menos ocho detenidos y un herido confirmado. En el centro de la capital se han registrado incidentes y momentos de tensión entre asistentes y agentes antidisturbios, con cargas policiales y contenedores volcados.
A partir de las 19.00 horas, la plaza de San Agustín ha empezado a llenarse de personas para mostrar su respaldo al cantante y expresar el rechazo ante las cargas policiales ocurridas en varias ciudades, entre ellas València hace dos días, en una convocatoria difundida por redes bajo el lema ‘Estem fartes’.
La concentración ha arrancado de forma pacífica con gritos en defensa de Hasél y contra la Policía, mientras algún vecino de los edificios adyacentes ha tirado huevos al suelo. Media hora después, la tensión se ha iniciado cuando uno de los manifestantes ha leído un discurso desde el móvil en el que ha denunciado la represión y ha advertido: «Si quieren guerra, tendrán guerra».
Tras la lectura del manifiesto, los participantes han salido de la plaza precedidos de una pancarta, momento en el que los antidisturbios han intervenido para frenar su avance y han cargado contra ellos, para después formar un cordón policial con la intención de evitar que se extendieran.
Sin embargo, varios grupos de personas han logrado desplazarse hacia las calles peatonales cercanas al MuVIM, donde han tirado un contenedor de vidrio y han lanzado botellas del interior hacia los policías. Algunos se han dispersado y otros han sido interceptados por los agentes.
Después se han producido incidentes cuando los participantes han llegado a la calle San Vicente, donde los policías han cargado de nuevo contra algunas personas. Diversos manifestantes han empujado contenedores en medio de la calle.
En este punto, se han vivido algunos de los momentos más tensos, con varios intentos de los manifestantes de sobrepasar el cordón policial, y se ha podido ver a una persona herida en la cabeza. Todos los comercios esenciales han echado el cierre antes de tiempo, con lo que la gente que estaba comprando allí en un gran supermercado ha tenido que quedarse en el interior.
Tras unos minutos, algún grupo ha logrado seguir en dirección a Jesús por calles peatonales y ha levantado pequeñas barreras con contenedores, palés y vallas de obra. Unos pocos manifestantes también se han atrincherado en calle Pelayo.
«LLIBERTAT D’EXPRESSIÓ»
Mientras tanto, los furgones de la Policía han obligado a subir al resto de los asistentes a la protesta de nuevo a San Agustín. Estos han continuado por las calles Xàtiva y San Vicente hacia la plaza del Ayuntamiento, donde se han vuelto a escuchar gritos de ‘Llibertat d’expressió’ y uno de los participantes ha sido esposado en el suelo por los agentes tras no seguir sus instrucciones.
La protesta ha seguido por Roger de Lauria, de nuevo con alguna carga, tras lo que los furgones han dispersado a los manifestantes hacia el norte de la calle Colón, en dirección a la Porta de la Mar y el antiguo cauce del río Túria.
Pasadas las nueve de la noche, los participantes se han dispersado de las calles del centro. La Delegación de Gobierno en la Comunitat Valenciana ha confirmado la detención de ocho personas y al menos un herido.