Se estima que en torno al 30% de la población tiene alergia al polen de alguna flor. Los síntomas suelen comenzar a manifestarse desde la infancia o adolescencia y en muchos casos es algo genético. Si los estornudos, la rinitis o la conjuntivitis se produce en torno a primavera (de marzo a junio) podemos sospechar que se trata de alergia y así intervenir cuanto antes con una visita al médico. No obstante, podemos hacer poco por los brotes mas que mantener las ventanas de casa cerradas en primavera (especialmente al amanecer y al anochecer), no tender la ropa al aire libre o evitar caminar por parques y jardines en la época de polinización. Si, de todos modos, notamos los síntomas de reacciones alérgicas podemos recurrir a algunos remedios naturales que aunque no los eliminará si nos ayudará a que sean más soportables.
2Menta
Uno de los efectos más molestos de la alergia al polen – y de la mayoría de las alergias – es la rinitis o congestión de las vías respiratorias por eso consumir sustancias que nos alivien en este sentido nos ayudará mucho. Una de estas sustancias, que además es natural, es la menta. Lo ideal es consumirla en infusión o inhalando los vapores de un aceite esencial de esta hierba. Esto nos ayudará a despejar las vías respiratorias y a reducir los estornudos y la carga nasal. También el té verde o el regaliz son potentes antihistamínicos que nos ayudarán a reducir los síntomas más incómodos de la alergia. La cúrcuma también puede ayudar ya que ayuda a bloquear la inmunoglobina E y por lo tanto disminuye los síntomas de la alergia.