Lo hemos visto a los políticos, como en la imagen que abre esta información. El Presidente del Gobierno fue ‘cazado’ utilizando debajo de una mascarilla higiénica la FFP2 que vienen utilizando en los últimos meses durante las comparecencias públicas (más allá de los Consejos de Ministros). También en el ámbito sanitario se ven imágenes de enfermeros y médico que utilizan una mascarilla quirúrgica por encima de la FFP2. Estas situaciones han llevado a generar en la población la sensación de que utilizar doble mascarilla protege más. ¿Realmente es así? ¿Qué es más determinante, el tipo de mascarilla o el ajuste que aporte? En MONCLOA vamos a arrojar un poco de luz sobre esta disparidad de opiniones y recomendaciones.
4¿CUÁLES SON LA COMBINACIONES MÁS ÓPTIMAS PARA LA DOBLE MASCARILLA?
Así pues, ¿en qué casos se deben utilizar dos y cuándo una? ¿Qué opciones en el primer caso son las más recomendadas? Desde el ámbito investigador se remarca que en tanto en cuanto cumplan la normativa actual, no habría por qué utilizar la doble mascarilla. Ahora bien, también reconocen que en algunos escenarios podría ser más que interesante su combinación.
- Mascarilla quirúrgica sobre FFP2: es la fórmula más utiliza por los profesionales sanitarios para evitar que salpicaduras y aerosoles de los pacientes y del ambiente se introduzcan en las vías respiratorias al tiempo que alargan la vida útil de la FFP2.
- Mascarilla higiénica y mascarilla quirúrgica: en el caso de que desconozcamos la capacidad de filtración de la mascarilla de tela, esta combinación puede ayudar a una mayor efectividad y fomentar un ajuste más óptimo. Ahora bien, se corre el riesgo de perder capacidad de respirabilidad.
- Mascarilla FFP2 sobre quirúrgica: este es un gran error que hace que el ajuste sea menor, y por lo tanto la mayor efectividad buscada se convierte en todo lo contrario.