Habrás oído hablar de que la salud está en la boca, o empieza por la boca, y es cierto porque es por donde comemos y eso se va al estómago, es para muchos el punto clave para la salud general. De cualquier forma, estéticamente también es una zona delicada. Los ojos no envejecen ni se dañan, pero la dentadura si y es lo primero en lo que nos fijamos, sobre todo en risas y sonrisas. Por eso cada vez hay más personas que por estética o necesidad se implantan dientes, pero, aparte del miedo lógico, siempre hay dudas sobre si dolerá, lo que nos costará… En definitiva, si vale la pena. Pues vamos a sacarte de dudas contándote todo lo que necesitas saber y la decisión será tuya.
3¿Qué hacer antes de decidirse?
Vamos a concretar primero lo de las pruebas, porque lo primero que hará el especialista es obtener una imagen de tu boca y una exploración de la encía para ver si está sana, porque si hay algún problema, antes hay que curarla para el proceso posterior. También deben de hacer una prueba de oclusión de boca, para ver cómo se muerde y así comprobar que la zona del implante reciba la presión adecuada.
En cuanto al hueso, es vital saber si hay suficiente para colocar el implante, y si no lo hay a veces se puede regenerar hueso del mismo paciente o de bovino -si, lo que lees-. No obstante, si no se ve claro y la masa ósea no es óptima, no se podría implantar. ¿Qué opción hay? Pues si, en singular, porque sólo cabría hace un clásico «puente», es decir, una prótesis dental que se apoya en las piezas de los lados. Para ello hay que limarlos para que el puente resista.
