Si hablamos de las mascarillas lo hacemos de esos complementos con los que hemos tenido que aprender a vivir. La pandemia desatada por la COVID-19 ha conseguido cambiar muchas de nuestras costumbres. Una de ellas, es la de salir a la calle sin protegernos con dichos elementos. Aunque todos las usamos, no siempre son igual de efectivas.
Cada tipo de mascarilla protectora tiene una función. En el caso de las de tela, por ejemplo, se han convertido en unas de las más demandas. Hay personas, incluso, que se animan a hacerlas en casa para poder ahorrarse unos cuantos euros. En este caso, aunque no todo el mundo lo tiene en cuenta, es necesario estar provisto de unos cuantos filtros.
Si eres de esos que prefieren no comprarlas, descubre los filtros para mascarillas, ¿qué tipos hay y cuánto duran?
2Filtros desechables, otra buena opción
Con cinco capas de protección, los filtros para mascarillas reemplazables están confeccionados con capas dobles de tela no tejida, capas dobles de tela soplada a través de fusión, y una protección extra dada por una capa de filtración PM 2,5 en medio.
Gracias a todas estas capas, son capaces de ofrecernos la mejor protección a la hora de bloquear partículas que provengan del humo, por ejemplo, y demás sustancias que contaminen. De hecho, para filtrar esas partículas uno de los mejores filtros es el específico anti-polvo.
Estos suelen poderse poner en todas las mascarillas de tela que encontramos y cuentan con varias funciones de lo más interesantes. Por ejemplo, sirven para eliminar los virus, sí, pero también otras partículas que estén en el aire. Estas pueden ser cualquier tipo de polvo, las contenidas en la niebla, en la contaminación, y otras como ceniza o polen.