La relación entre la salud y los alimentos está más que demostrada en multitud de estudios a lo largo de muchos años. La OMS lo dice claro también: una dieta saludable nos protege contra enfermedades no transmisibles como el cáncer, las cardiopatías o la diabetes. La alimentación es uno de los factores que determinan la esperanza de vida de las personas. Gracias a una dieta equilibrada podemos favorecer el buen funcionamiento de órganos de nuestro cuerpo imprescindibles para la salud general del mismo.
4OJO CON LAS PROTEÍNAS
Un exceso de proteínas puede provocar muchos problemas de riñón, y no es tan difícil excederse con determinados hábitos de alimentación. Los riñones se encargan de limpiar la sangre de desechos e impurezas, que se expulsan a través de la orina. Uno de esos desechos es la urea, que procede de la descomposición de las proteínas.
Esto significa que si se sobrecarga al riñón con un consumo elevado de alimentos proteicos, esto puede provocar daños en su función. Este tipo de alimentos son los lácteos, los huevos y las carnes rojas. Según las recomendaciones de la OMS, solamente un 10 o un 15% de las calorías diarias deberían proceder de las proteínas.