El nuevo presidente de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, ha tomado muchas decisiones en sus primeras horas en el Despacho Oval de la Casa Blanca. Además de las diecisiete medidas que ha arreglado Biden en su primer día de trabajo al frente del país, el líder estadounidense ha cambiado también la decoración y algunas funcionalidades que Trump mantuvo en la emblemática oficina de Washington D.C. durante sus cuatro años de mandato. En particular, hay un cambio destacable por lo surrealista que parece. El republicano tenía un botón rojo en su mesa, no para enviar bombas nucleares a ningún sitio, sino para que le trajesen inmediatamente una Coca-Cola dietética en bandeja de plata, literalmente.
Dos periodistas descubrieron la existencia de este botón en 2019, cuando acudieron a la Casa Blanca para entrevistar al presidente y este lo presionó, tras lo que entró en la sala rápidamente un mayordomo con una Coca-Cola dietética en una bandeja de plata.
Este jueves, uno de esos periodistas que conocieron el botón, ha publicado a través de Twitter nuevas fotografías del despacho acondicionado ya para Joe Bien, confirmando que el botón había desaparecido.
«El presidente Biden ha quitado el botón Diet Coke. Cuando @ShippersUnbound y entrevisté a Donald Trump en 2019, nos fascinó lo que hizo el pequeño botón rojo. Finalmente, Trump lo presionó, y un mayordomo trajo rápidamente una Coca-Cola Light en bandeja de plata. Se ha ido ahora«, ha escrito el periodista Tom Newton Dunn.
Mucho se ha escrito en los diarios norteamericanos sobre el misterioso botón. Se habla de él desde 2017, aunque muchos pensaban que se trataba de una broma. Cuando algún periodista se reunía con Donald Trump en la Oficina Oval, usualmente se percataban del botón y el republicano terminaba apartándolo.
El que fue miembro del equipo de comunicaciones de Trump hasta 2018, Cliff Sims, escribió sobre el botón en un artículo, contando: «Si Trump notaba que alguien miraba la caja, y a veces sin que nadie se lo pidiera, la levantaba y la alejaba más de él». Después, Trump quizá diría algo como: «No se preocupe por eso. Nadie quiere que presione ese botón, así que lo dejaremos aquí. Entonces, ¿qué estabas diciendo?».
Pero entonces, eventualmente el expresidente lo pulsaba: «Sin saber qué hacer, los invitados se miraban unos a otros con las cejas arqueadas. Momentos después, un mayordomo entraba a la habitación con un vaso lleno de Coca-Cola Light en una bandeja de plata, y Trump se echaba a reír«.
En realidad, al nuevo presidente Joe Biden también le gusta la Coca-Cola. En concreto, la zero, tal y como reportó el Washington Post en octubre de 2020. No obstante, parece que Biden prefiere levantarse él mismo a por ella.