Extremadura es una de las comunidades autónomas más bonitas de España. Muchos de sus pueblos, de esos de los de toda la vida, nos esperan con los brazos abiertos en cualquier época del año. Sin embargo, hay algunos que están especialmente bonitos en invierno, por lo que no nos podemos perder alguna que otra escapada para disfrutar de increíbles paisajes cargados de magia.
En un año en el que la COVID-19 nos ha obligado a quedarnos en casa o viajar lo más cerca posible, es una buena oportunidad para descubrir lugares que tenemos prácticamente al lado y a los que nunca hemos ido. Nos sorprenderán sus calles, sus gentes y, por supuesto, su gastronomía.
Si nunca has visitado estas zonas, descubre los pueblos más bonitos de Extremadura para ir este invierno.
1Guadalupe, en Cáceres, uno de los pueblos más imponentes
Guadalupe es uno de los pueblos más bonitos que podemos visitar en invierno en Extremadura. La comarca, situada en Las Villuercas, cuenta con un imponente monasterio que te dejará de piedra. Esta obra arquitectónica fue declarada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El pueblo cuenta con tan solo 2.500 habitantes, por lo que la tranquilidad que reina en sus calles y comercios es absoluta. Una de las cosas que más nos llamarán la atención son sus casas. Los balcones suelen estar adornados con macetas llenas de flores en los meses de calor y con nieve en los de invierno.
Podremos, además, pasear por sus calles empedradas mientras disfrutamos de la bella vista de sus casas enjalbegadas o sus edificios entramados. Uno de los sitios imperdibles es la Plaza Mayor, que reconoceremos por los soportales. Y es que estos son el máximo exponente de su arquitectura.