El insomnio y el resto de problemas que dificultan que cojamos el sueño por la noche son una de las patologías que más visitas generan al médico cada año. Bien sea un problema de inicio, que no podamos dormirnos, bien sea que nos despertamos en mitad de la noche y ya no podemos continuar el sueño, la falta de este de forma continuada nos afecta muy negativamente en nuestra vida y en nuestra salud provocando problemas sociales, laborales y otro tipo de consecuencias. Por eso hoy, queremos arrojar un poco de luz respecto a las causas que no nos dejan dormir, y sus posibles soluciones.
4Cambio de conducta y de pensamientos
Muchas veces, con los problemas del sueño se genera un círculo vicioso del que es muy difícil salir. Como no podemos dormir, nos ponemos más nerviosos porque no podemos dormir, y entonces, no podemos dormir… Parece un trabalenguas pero es el día a día para muchas personas que padecen este problema. Así que, lo primero que debemos hacer es cambiar esos pensamientos que nos conducen a dar mil vueltas en la cama. Ayuda mucho que cambiemos también la conducta y que predispongamos el cuerpo y la cabeza al descanso. ¿Cómo? Regulando la hora de acostarnos y despertarnos, eliminando las siestas y las cenas copiosas, evitando el móvil o el trabajo justo antes de acostarnos, limitando el consumo de tabaco y bebidas alcohólicas y, en general, llevando una vida saludable. A veces, es tan sencillo como cambiar cosas pequeñas y la calidad del sueño se enriquece sustancialmente.