La gastronomía española se caracteriza por ser muy variada y estar llena de recetas tradicionales que destacan por su sabor. Además, muchos de ellos son platos perfectos para poder hacer frente a las bajas temperaturas propias de esta época del año. Entre ellos se encuentran los callos, uno de los mejores guisos que se pueden preparar.
Los amantes de la casquería pueden encontrar en este plato una opción ideal para disfrutar, siendo además una elaboración que, aunque requiere de una cantidad importante de ingredientes, es muy sencilla de preparar. Te contamos cómo preparar callos a la madrileña, una de las elaboraciones más típicas.
6PREPARACIÓN DE LA SALSA
Mientras se cuecen los callos puedes empezar a preparar la salsa. Para ello pela y pica muy finos tanto los ajos como la cebolla. Utiliza una sartén antiadherente amplia para añadir un poco de aceite y ponla a fuego medio-bajo. Una vez que esté caliente podrás añadir la cebolla y los ajos junto a un poco de sal y guindilla picada al gusto. Sofríe durante unos 10 minutos, hasta que la cebolla esté tierna y transparente.
Una vez que la cebolla esté lista tendrás que añadir el pimentó, la carne de pimiento choricero y la harina; y sin dejar de remover durante un minuto incorpora el vino blanco. Espera unos 3 minutos y añade la salsa de tomate, mezclando bien todo durante un par de minutos.
Cuando estén listos los callos y la manita, saca esta última y deshuésala. El resto podrás cortarlo como prefieras, ya sea en tiras o cuadraditos. A continuación saca del caldo los clavos de olor, los granos de pimienta y la hoja de laurel; y luego saca la zanahoria y la cebolla para ponerlas en un vaso de la batidora junto a un poco de caldo y tritúralo bien.