Cada vez es más habitual encontrar en farmacias y perfumerías champús, acondicionadores y cremas de todo tipo hechas a base de aceite de argán. El creciente uso de este ingrediente originario de Marruecos se debe a los múltiples beneficios que proporciona tanto a nuestra piel como a nuestro cuero cabelludo. Dicho aceite se obtiene de las semillas del árbol de argán y, aunque se trata de un producto comestible, su uso es más común en cosméticos y productos de belleza. Conocido como el «oro líquido de Marruecos», el aceite de argán es perfecto para proteger e hidratar nuestro cutis y aquí te explicamos el porqué.
3Usa aceite de argán como exfoliante facial
Una de las tantas propiedades que posee este ingrediente es que también funciona como exfoliante. Preparar tu propio exfoliante facial con este aceite es realmente muy sencillo. Simplemente debes mezclar una cucharada de azúcar moreno con un par de gotas de aceite de argán y aplicar en tu rostro durante aproximadamente 3 minutos dándote masajes de forma circular. Luego enjuaga con agua tibia y seca suavemente con unas toalla limpia. Además de ser exfoliante, esta mezcla casera tiene efecto «anti-age».