El pasado jueves comenzó a viralizarse en la red social Twitter una extraña imagen correspondiente a la campaña de un colectivo feminista con el objetivo de concienciar sobre los peligros que sufren las mujeres a causa de la violencia machista en entornos de fiesta y mundo nocturno. Con el eslogan: «El agresor sexual puede ser cualquiera», el cartel ha sido tildado de paranoico al generar, según sus detractores, una visión generalizada de los hombres como seres peligrosos.
El dibujo muestra a cuatro chicos de perfiles distintos («el chico que te gusta», «el simpático de la fiesta», «el colega militante» y «tu amigo de clase»), para decir, tal y como indica el eslogan situado debajo, que «el agresor sexual puede ser cualquiera» de ellos, dando a entender, según denuncian algunos, que todos los hombres pueden ser un agresor con la generalización y gravedad que eso conllevaría.
En concreto, el periodista Juan Soto Ivars, compartía la imagen a través de Twitter y comentaba: «¡Una estupenda campaña para crear psicosis y paranoia entre las chicas jóvenes!». Por otro lado, el detalle que también ha sido señalado es el de que, en otra lámina, y dentro de la amalgama de personajes que utiliza la campaña, el único personaje negro es el que adopta la postura positiva, al abogar por dejar a las mujeres «tranquilas» en la discoteca, convirtiéndose así en la voz de la razón dentro de la caricatura.
Así, el hecho de que sea el personaje negro el que represente la visión adecuada, frente a otros dos personajes masculinos blancos que funcionan como espejo de actitudes agresivas incómodas como ir «a por ellas» en una discoteca, ha sorprendido a algunas personas, que critican un sesgo por parte del colectivo.
FINANCIADA POR EL MINISTERIO DE IRENE MONTERO
Las láminas pertenecen al proyecto «Noches seguras para todas», compartido el pasado octubre y realizada en base a informaciones recogidas en 2020. La lanza el colectivo Mujeres Jóvenes Federación, una asociación juvenil que nació en 1986 y que obtiene subvención por parte del Instituto de la Mujer, órgano gubernamental adscrito al Ministerio de Igualdad, que dirige actualmente Irene Montero (Unidas Podemos).
En el año 2018, la asociación obtuvo la certificación de «Entidad de Utilidad Pública», y en 2019, recibió una subvención del Instituto de la Mujer por un valor de 25.442 euros, con un total de 223.116 euros de subvención del IRPF estatal para varios proyectos del colectivo, entre los que se encuentra «Noches seguras para todas», como recoge el documento de auditoría disponible online. Asimismo, el colectivo recibió 36.206 euros de IRPF de la Comunidad de Madrid. Por parte del organismo público Instituto de la Juventud (INJUVE), recibió 49.000 euros para el «mantenimiento y funcionamiento de la entidad».
En este contexto, «Noches seguras para todas» es «una investigación-acción feminista participativa que pretende arrojar luz sobre las violencias sexuales que las mujeres jóvenes sufren en su ocio nocturno», tal y como describe el colectivo en el documento.
La asociación indica que para el estudio «hemos contado con la participación tanto de mujeres como de hombres jóvenes, quienes con sus experiencias, miradas y perspectivas, han aportado un conocimiento cercano y profundo de esta problemática social».
Es al final del documento, en el apartado «campaña de sensibilización», donde se adjuntan las diversas láminas, entre ellas, las que están siendo objeto de crítica.
OPINIONES
Frente a las críticas a la campaña, también hay comentarios que la defienden argumentando que solo expone la «realidad», aunque algunas mujeres han advertido que puede caer en la infantilización. El usuario @vnrumbo72, por ejemplo, tuitea: «Todo depende de la lectura que le des. A mi simplemente me dice. Ten cuidado y detecta los signos. Quien menos te esperas te puede hacer daño. Soy hombre y no me siento agredido«, asegura.
Paralelamente, la usuaria @kris_Cb_21 recalca: «Esta campaña dice lo mismo que me decía mi madre los fines de semana. Entiendo que te haga sentir incómodo. Pero si voy a una fiesta soy consiente de que cualquiera puede ser un agresor», defiende. «Hay que saber leer los signos del acoso», añade @raquelgarcias17.
Además, la imagen ya ha empezado a ser objeto de mofas y parodias como las siguientes: