Si hay un programa de televisión que consigue mantenernos pegados a la pantalla durante todo el tiempo que dura, que son meses, ese es Gran Hermano. Es normal que, después de tantas ediciones, nos terminemos olvidando de algunos de los concursantes que pasan por la casa. Sin embargo, jamás podremos hacerlo de dos de sus protagonistas absolutos: Kiko Hernández y Patricia Ledesma.
Los dos jóvenes participaron en GH 3 y terminaron manteniendo una relación romántica. Desde que se conocieron, saltaron chispas entre ambos. Tanto, que no pudieron evitar ser también los protagonistas de otro hito histórico del programa. Y es que, los dos, ofrecieron en pantalla el primer edredoning de la historia del reality. ¿Recuerdas cómo fueron esos momentos?
Si quieres hacer un repaso por lo más destacado de nuestro reality favorito, descubre a Kiko Hernández y Patricia Ledesma: así fue el primer edredoning de Gran Hermano.
Kiko Hernández y Patricia Ledesma, concursantes de Gran Hermano 3
De vez en cuando, a Telecinco le gusta recordar a los protagonistas más importantes de sus programas emblemáticos. Sobre todo, cuando estos han conseguido instaurar algo histórico que, a día de hoy, se sigue haciendo más que nunca. En una ocasión, la cadena decidió recordar cómo fueron los comienzos de personajes tan emblemáticos como Kiko Hernández o Patricia Ledesma.
Los dos entraron en Gran Hermano 3 y en la casa de Guadalix de la Sierra fue donde se conocieron. Los dos comenzaron una relación en común tan solo diez días después de conocerse. Y, de hecho, sigue siendo una de las relaciones que más ha marcado a la audiencia desde los comienzos del reality. Aunque poco queda de este encuentro, es imposible no hacer memoria y recuperar ese momentazo del programa.
Ambos protagonistas, fueron los protagonistas absolutos de la primera hora sin cámaras del programa. Aunque es cierto que hubo edredoning, al ser los orígenes del mismo no lo vimos igual que lo vemos ahora en otros realities, como puede ser La Casa Fuerte. Además, Patricia siempre quiso desmentir que pasara nada más que una conversación entre las cuatro paredes.
Estrenaron la «hora sin cámaras»
Son pocas las ocasiones, en la actualidad, en las que tanto Kiko Hernández como Patricia Ledesma han querido hablar de su relación. Aunque al principio todo fueron dramas y platós, lo cierto es que ahora las cosas ya podemos decir que se han terminado calmando de una vez por todas.
En una de las ocasiones en las que Patricia acudió a la televisión, lo hace siempre que Telecinco desea hacer un repaso por los concursantes de Gran Hermano más sonados, le quiso contar a Toñi Moreno, qué fue aquello que le enamoró de Kiko. De acuerdo a sus propias palabras: «Su sentido del humor, me reía mucho con él y aún hoy lo sigo haciendo«. Parece que la concursante aún guarda buenos recuerdos de su paso por el famosos reality, y también de su expareja.
Como no puede ser de otra forma, también cada vez que acude a un plató de televisión, le recuerdan que fue ella, junto a Kiko Hernández, la que estrenó la que ahora es por todos conocida como «hora sin cámaras». Ella sigue afirmando que allí solo hablaron y compartieron una copa, además de confidencias. Además, quiso añadir que: «No es el edredoning que se conoce ahora». Puede que nunca lo sepamos.
Una ruptura no demasiado anunciada
Los comienzos entre Kiko Hernández y Patricia Ledesma en Gran Hermano sucedieron tan rápido, que poco podíamos imaginar que terminarían como al final terminaron. Desde el principio, todo parecía funcionar de forma sencilla, divertida y perfecta entre ellos. Sin embargo, la pareja terminó rompiendo su relación.
A partir de ese momento, comenzó una guerra en los platós de televisión que parecía imposible de parar. No por nada, aún la recordamos como una de las relaciones que más titulares, horas y contenido dio en televisión allá por el año 2002. Tanto fue así, que en la lucha no se encontraban solos.
La madre de Patricia, Encarni Manfredi, no dudó en salir del anonimato para apoyar a su hija por completo. De hecho, se considera que ella tuvo un papel más que importante en la historia, y quiso demostrar que una relación de tres, si es con la suegra, no es para tanto. Al final, ella fue la que cogió más fama. Tanto, que le ofrecieron participar en otro de los realities del momento: Hotel Glam.
Patricia Ledesma, qué fue de la exconcursante de Gran Hermano
Actualmente, después de tantos años, Patricia Ledesma ha tenido un futuro muy diferente al de Kiko Hernández. Si hablamos de su trabajo, ejerce de coach de crecimiento personal y también es comerciante en el mercado del cripto y el forex. Es decir, se encarga de transacciones monetarias de uno de los negocios más famosos a día de hoy en todo el mundo.
Tiene dos hijos y disfruta mucho de su anonimato. Lejos de vivir en la capital, decidió asentarse en su tierra, Sevilla, una ciudad mucho más tranquila y donde puede vivir alejada de los focos. Aquí reside junto a su marido y sus dos hijos. Ha llegado un punto en el que rechaza la popularidad y la fama fue algo que dejó atrás.
En una de las últimas entrevistas que concedió, afirmó que ya apenas la conocen por la calle, y que eso es lo que más le gusta. Al más puro estilo de las influencers del momento, otra de las cosas que más le gusta hacer es subir contenido en sus redes sociales. Aquí comparte fotos y vídeos donde publicita looks y peinados. Al final de todo, parece que no le va nada mal.
El presente de Kiko Hernández
Kiko Hernández, por supuesto, ha terminado ser todo lo contrario a Patricia Ledesma. Al menos, en lo que a mantener el anonimato se refiere. El concursante de Gran Hermano quiso aprovechar su popularidad y raro era el programa de Telecinco donde no le veíamos.
Poco a poco, se fue labrando su propio futuro como colaborador. Sin duda, se consagró en el programa Sálvame, que tantas alegrías le ha dado. En la actualidad, hay incluso momentos en los que trabaja en el programa como presentador, sustituyendo al mítico Jorge Javier Vázquez.
En el plano sentimental, Patricia ha sido la única pareja reconocida en los 17 años que lleva en televisión. Hace poco tiempo, el colaborador quiso adoptar a sus dos hijas, con las que vive en Madrid y que, junto a su trabajo, se han convertido en lo mejor de su vida.