A lo largo de toda la historia de Gran Hermano, el reality más popular de Telecinco, ha ido surgiendo el amor entre las paredes de la casa de Guadalix de la Sierra. Sin embargo, muchas de las historias fraguadas en ella no acabaron demasiado bien.
En un año en el que la pandemia sanitaria del coronavirus ha provocado la ausencia del concurso, repasamos las historias de amor que acabaron como el rosario de la aurora, con los protagonistas inmersos en discusiones en los platós de televisión.
4SUSO Y SOFÍA SUESCÚN, UNA RELACIÓN CORTA E INTENSA QUE COMENZÓ EN GRAN HERMANO
Sofía Suescun y Suso Álvarez fueron dos de los grandes protagonistas de la decimosexta edición de Gran Hermano. Su relación fue fugaz, ya que empezó en la propia casa de Guadalix, haciendo que la navarra se enganchase rápidamente del catalán.
Sin embargo, este llegó a cansarse de ella hasta que decidió tener un idilio con Raquel, otra de las concursantes. En la relación también se vio envuelta la madre de Sofía, Maite Galdeano, con la que mantuvo varias disputas en plató.
El propio Suso aseguró hace unos meses que su ruptura son la navarra tuvo que ver por la falta de conexión, asegurando que para él era «superimportante tener conversaciones, hablar y tener un apoyo» y que no se fijaba solo «en un físico». «Lo que me encontré con Sofía es que a la hora de tener una conversación, no la había«, sentenció.