Apple de manera intencional ha manipulado e informado del rendimiento de los más populares iPhone, representando así un acto de clara desobediencia programada. Son miles los usuarios que experimentaron la necesidad de transformar la batería de su iPhone, o de forma directa su móvil. Los consumidores en Europa han tenido una reacción a través de la aplicación de una demanda, con lo cual han solicitado una serie de compensaciones.
Apple quiso que sus iPhone 6 terminaran obsoletos antes de la fecha que correspondía. La inmensa mayoría de usuarios considero que es una situación intolerable para ellos, escenario que condujo a la OCU en compañía de otras asociaciones de prestigio como Altroconsumo, Deco Proteste y Test-Achats, a presentar una demanda contra la gigante.
Ha podido comprobarse que Apple tuvo una manipulación intencionada del software de los iPhone 6, 6S, 6 Plus y 6S Plus, esto con la finalidad de enmascarar las problemáticas de rendimiento de sus respectivas baterías. Sin embargo, esta decisión incidiría en que los teléfonos queden ralentizados y perdieran un increíble rendimiento que repercutiría en su apagado inesperado. Desafortunadamente, fue una situación que no informo a sus usuarios, una actuación deliberada que hizo que Apple condicionara a todos sus consumidores, haciendo que muchos de ellos tuvieran que realizar la renovación de sus móviles y por ende, cayeran en un daño económico severo.
Es una situación que ha generado impresionantes reacciones a lo largo del mundo, por ejemplo en Italia fue sancionada por la Autoridad de Competencia, en los Estados Unidos tuvo que enfrentar una demanda de miles de afectados por la rotunda desaceleración de los móviles, mientras que en Francia se vio en la obligación de firmar un acuerdo millonario de acuerdo extrajudicial.
Las asociaciones de consumidores compuestas por Euroconsumers, han tenido la oportunidad de ir en diversas oportunidades a Apple, esto como un intento de obtener una compensación para los dueños de los iPhone 6, 6 Plus, 6s y 6s Plus; no obstante, el intento no dio frutos. Se vieron mensajes como los siguientes: “No nos conformamos: no se puede permitir una actividad tan perjudicial e irresponsable como la obsolescencia programada. Por eso damos un paso adelante diciendo #StopPlannedObsolescence. ¡No a la #ObsolescenciaiPhone6!”
En todo el territorio español, la obsolescencia en cualquiera de sus maneras (prematura o programada), no se encuentra impuesta como sanción, aunque la OCU sabe que Apple ha actuado de forma ilegal. Es decir, la compañía ha escondido mucha información a los usuarios, destruyendo las normas que establecen a la información como un derecho indispensable de los usuarios y consumidores.
La OCU ha presentado una acción de carácter legal contar Apple, esto es devenido por la obsolescencia programada adscrita al iPhone 6, 6 Plus, 6s y 6s Plus. La demanda de la organización recae en prácticas comerciales engañosas, injustas y agresivas del fabricante.
Según las consideraciones de la OCU: “Apple debe compensar a los usuarios de modelos iPhone 6, 6s, 6 Plus y 6s Plus con una cantidad entre 99 y 189 euros, el equivalente a la suma del importe de la batería (entre 29 y 89 euros, según si se acogió o no al plan de reemplazo), más un 10% del precio de compra del móvil (entre 699 y 999 euros, según el modelo, capacidad, etc.). Para OCU, los afectados deben ser compensados por:
• El perjuicio causado por el cambio de móvil o de batería al que se vieron obligados,
• Los daños morales provocados: la pérdida de rendimiento de sus dispositivos hizo que vieran frustradas sus expectativas y su grado de satisfacción con la marca”.