Esta Navidad es más especial que nunca, al menos así es como se la plantean muchas familias. Tras un año especialmente duro, con carencias afectivas, de movilidad y gran incertidumbre, este año se proponen «aglutinar» en estas fechas toda la alegría que se ha quedado en el camino. ¿Cómo? Sin escatimar en nada ni en decoración, regalos, y especialmente el menú de Navidad. Así que… bienvenido de nuevo a nuestras vidas marisco, pues si bien es un plato que siempre ha estado presente en nuestro menú navideño, es cierto que debido a los altos precios y al cambio de modas, estaba quedando relegado a una segunda o tercera opción. Para aquellos que quieren darse un homenaje estas fiestas, os traemos una receta de sopa de marisco.
5La sopa de marisco
Por último, añadimos los mejillones y las gambas peladas y ajustamos la sal. Cuidado en este sentido, pues el marisco no suele necesitar mucha sal. Aquí es cuando también podemos añadir un poco de guindilla si nos gusta el sabor ligeramente picante, pero también siendo muy cuidadosos pues la guindilla continua dando sabor a nuestra sopa de marisco incluso cuando hemos retirado la cazuela de la cocción. El resultado, como verás, es una sopa con mucho cuerpo, mucho sabor y mucho marisco que hará que al menos en este sentido, nuestra Navidad si sea como las de antes.